¡DAMELO!

︻┳═ 一ˊˎ- 𝙷𝚊𝚓𝚒𝚖𝚎 𝙺𝚘𝚔𝚘𝚗𝚘𝚒

"=⌕ [Warnings: Lectora dominante, privacion sensorial, bondage, masturbacion & control de orgasmo] //﹫

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-ˏˋEn caso de que el contenido de la historia no sea de tu agrado, te pido de manera más amable que te retires de este fanfic y cheques alguno de los otros FF que tengo disponibles. ˊˎ

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ĸιɴĸy volumen: [■■□□□□□□□□] 20%

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El dinero siempre fue el principal objetivo de Hajime Kokonoi, quien dejó su alma pudrirse en millones y millones de yenes, lo cual, a veces complicaba la relación que tenían ustedes dos, especialmente cuando se peleaban.

Hoy era el peor de los días para hacerlo, había arruinado todo tu trabajo por el simple hecho de que uno de tus colegas era policía, regresando sola hacia la gran mansión que habitaban, sabías que en cualquier momento llegaría con bolsas llenas de joyas y vestidos.

Ramos enormes, llenas de tus flores favoritas y como olvidar la típica cena, pero esta vez no cederías a que te rebajara de esa manera, no eras alguien que podría comprar cuando se le diera la gana, eras su pareja no su juguete.

Kokonoi: Ya llegue cariño - dijo contento -

El eco de su presencia resonaba contras las enormes paredes, este cambio su zapatos para ir a su habitación compartida al no oír respuesta tuya, dejo que un suspiro saliera de sí, esperando que esta vez aceptaras sus disculpas más fácilmente que las otras veces.

Nunca aceptabas sus regalos hasta días después, donde a propósito agenda durante esos días eventos donde te encontrabas casi obligada en usar las nuevas adquisiciones que había consigo como disculpa, estaba mal y lo entendió hasta el día de hoy.

Al llegar a la puerta de la habitación principal, soltó bolsas de una de sus manos para abrir la puerta y entrar, encontrándose con la habitación oscura y tu cuerpo recostado en la cama, tapada de pies a cabeza, nuevamente dejó que un suspiro saliera de él, dejando todo en una esquina de la habitación.

Se cambió rápidamente a su pijama para luego tomar lugar contigo, pero fue sorprendido que lo que se encontraba en la cama no eras tu, si no un bulto hecho de almohadas y el peluche que te había regalado la semana pasada.

T/N: Al menos me sirvio de algo ese peluche - dijiste sarcastica - Bienvenido a casa, Hajime Kokonoi

Prendiste las luces y cerraste la puerta, este se encontraba sorprendido en la cama, te habías escondido detrás de la puerta para que no te viera, dejando que una sonrisa nerviosa se postrara en su rostro, algo dentro de sí sabía que ni la joya más rara o el vestido más precioso lo salvaría de esto.

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