Las horas pasaron rápido, la familia durmió con plenitud sin preocupaciones, pero todo tiene un fin y su buena suerte se acabó antes de lo previsto.
El señor vampiro despertó agitado y alerta, el lazo de sangre que comparte con todos sus hijos dió un tirón avisando que el más longevo de todos estaba muy cerca.
Se incorporó y movió de forma brusca a su Alfa, el lobo despertó pero el inmortal le puso un dedo en los labios alertandolo de que no hablara.
"Está cerca, puedo sentirlo, y no viene sólo "
El semblante del moreno se convirtió en una mascara de seriedad después del mensaje por el enlace mental.
"¿Con quién viene?"
Necesitarían un milagro para salvarse... o una tragedia
"Ángeles, son demasiados"
La mente de ambos iba a mil kilómetros por hora en busca de una solución, toda la manada estaba en medio del conflicto, serían masacrados.
"Tengo una idea"
El lobo se puso de pié, el movimiento brusco de la cama despertó al bebé azúl pero el vampiro lo cargó antes de que empezara a llorar.
Las manos de Magnus se tornaron azules y llamaradas de magia se extendieron, caminaron por las paredes, los muebles, las ventanas, salieron a todos los rincones de la mansión y la cubrieron en su totalidad.
Unas palabras mentales y ademanes más tarde la mansión apareció en el centro del Coliseo en el castillo Lightwood, dejando un hueco enorme donde antes fue su ubicación.
Los dos se dirigieron afuera, Magnus les transmitió a la manada todo lo malo y el porqué del traslado, nadie preguntó o hizo más comentarios, siguieron a su lider y a su luna, quién cargaba al primogénito y mestizo.
- ¡Al salón de guerra ahora!
Apenas habló un poco fuerte, pero su voz resonó en todo el lugar, abrió la marcha pasando por varios pasillos hasta llegar a un lugar abierto y amplio, circular pero con una plataforma en el centro.
Todos los vampiros residentes del castillo ya estaban ahí, los lobos también entraron, cuando las cosas son de vida o muerte las diferencias quedan en el olvido.
- Caín llegó, ya está aquí y trae las legiones de Ángeles con él.
Fueron las palabras que soltó el vampiro milenario apenas subió a la plataforma acompañado de Magnus y su hijo.
Una reacción humana hubiera sido el pánico, pero como no había nadie humano en la multitud sólo obtuvieron silencio.
- ¿Cuál es el plan?
Dijo el rubio oxigenado vampiro con determinación y ganas de matar.
- Lucharemos, pero contra los Ángeles perderemos si lo hacemos sólos.
La fuerza de un lobo o un vampiro era el equivalente a la mitad de un guerrero celestial, pero si hubiera una manera...
- Si me permite, tengo una sugerencia
Habló una loba de cabellera roja sangre, ella podía hacer magia, pero era una magia distinta, antigua y de símbolos raros.
- Habla Clary, cualquier idea es bien recibida.
Ella se adelantó y la multitud hizo espacio.
- Yo podría crear una runa de poder que nos uniera a todos, si no podemos derrotarlos sólos, podríamos enlazar muestras habilidades, lobos y vampiros para ser una mezcla temporal.
Era una buena idea, la mejor hasta el momento, pero, ¿Quién sería el conejillo de Indias?
- Bien, hay que intentarlo
Habló Jace y caminó hasta estar frente a ella, ambos sujetaron sus antebrazos y ella habló en un idioma desconocido para la mayoría más joven.
Un lazo plateado y uno rojo surgió de cada hombro, ambos se encontraron en el centro y formaron un símbolo, una runa de Unión.
- ¿Y bien?
Todos esperaban algo enorme para demostrar que había funcionado, la exloba desapareció en un borrón de velocidad hasta que regresó de forma abrupta, al rubio le surgieron colmillos al tiempo que cambiaba a un lobo de pelaje dorado.
- Funciona
La esperanza regresó a todos los presentes, había una mínima posibilidad de sobrevivir y se aferrarían a ella con uñas y dientes.
- Elijan una pareja para pelear, luego que Clary los una.
Todos obedecieron la orden del Alfa, la pareja arriba estaba al mando y la voz de ambos era obedecida por igual.
- Necesitamos armaduras
Dijo el lobo al vampiro, ellos no tenían nada de eso, sus disputas eran arregladas convertidos en animales.
- Maryse, trae todo lo necesario
La "madre" del vampiro desapareció con una docena de otros individuos y regresaron con los brazos a reventar de partes de armaduras.
Magnus les lanzó un hechizo para que pudieran transformarse al mismo tiempo que su portador, sería de utilidad para protegerse de los Ángeles.
Y una diminuta personita empezó a gimotear, la atención de los padres fue directo a su pequeño, ambos escucharon su estómago.
- Tiene hambre
El lobo hizo aparecer una mamila preparada, le ofreció al bebé en los brazos de su pareja pero el niño olfateó la formula y alejó su carita ofendido.
- ¿Porqué no la quieres?
El vampiro tuvo una idea, le cedió al recién nacido al lobo, tomó la botella, la destapó, se cortó una vena y dejó caer la sangre en la leche, mientras lo hacía el bebé no se perdió ni un segundo de la acción.
- Veamos mi amor, ¿Qué dices ahora?
Lo acercó a su boquita y el niño se prendió a la botellita como si su vida dependiera de ello, chupó con avidez hasta que no quedó ni una gota.
Pero al termino empezó a llorar, primero despacio y luego sus gritos hicieron que todos se taparan los oídos, era un niño banshe porque ese volumen y agudez no eran normales.
- Dame otro
Dijo Alec muy tranquilo como si no escuchara nada, y sonriente disfrutando del desastre que era su primogénito, aparecieron otras dos botellas donde derramó su sangre para después agitarlas y darle una al bebé que dejó el drama para comer.
Se terminó otras dos y cuando el lobo lo puso contra su hombro tras un par de palmaditas soltó un eructo digno del rugido de un león.
Volteó a ver a su padre vampiro y le tendió los bracitos, el señor del castillo lo recibió muy gustoso y en breve estaba dormido profundamente.
- Ese es mi hijo
Dijo orgulloso el pálido ser para mecer a su pequeño azúl con adoración.
El Alfa los observaba hasta que el ángel caído lo miró serio, algo no andaba bien, le diría algo que no le iba a gustar.
"Magnus, tú no debes pelear"
El enojo salió con rapidez
"No me vengas con ..."
Apretaba los dientes para no gritarle en la cabeza
"Alguien debe cuidar a nuestro hijo, y no confío en nadie más para hacerlo"
Eso hizo desaparecer por completo la furia del lobo, su mate tenía razón, nadie sería capaz de cuidar a su bebé como ellos mismos.
"Promete que volverás"
La voz mental casi se le quebró al decirlo, era tan doloroso tan sólo imaginarlo lejos
"Lo prometo"
Pero hubo un factor externo que no tuvieron en cuenta y eso costaría muchas vidas.
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Creador de Razas (MALEC)
FanfictionOmegaverse, Lobos y vampiros, angeles caídos, dios, guerra, mpreg, magia, poder, tragedia Anteriormente llamada sólo MALEC ########### Créditos de la portada a quien corresponda