CAPÍTULO 22

1.2K 134 96
                                    

TINE

—Si.

Lo digo tan rápido que me sorprende. Tomo su rostro entre mis manos y levantó la cabeza hacia el.

La atmósfera es calurosa pero es lo que menos importa, cerré los ojos y sentí sus labios rozar los míos.

—Pero lo digo enserió... ¿eh? No creas que es una broma. —Siento la manera en que Sarawat sonríe.

Mis labios se mueven contra los suyos como si tratara de buscar algo, sus manos me toman del cabello hasta profundizar el beso.

—Pero si es así ¿Donde se supone que iremos cuando escapamos de aquí?

—Ya he pensado en eso —Sarawat se aleja. —Tengo unos 6100 bat ahorrados dentro de mi habitación, debemos escapar por los matorrales atrás del centro de conversión, subiremos por las bayas de alambre, estamos a las afueras de Bangkok, el autobús más cercano de este pueblo a la ciudad está como ha una hora, o algo así, no se bien pero lo voy a averiguar. —Agita las manos mientras me explica y lo tomo de las muñecas —luego de llegar a Bangkok vamos a ir a la estación Hua Lamphong hasta krabi, tengo conocidos ahí, les diremos que somos amigos y nadie sospechara. Krabi es una ciudad tan hermosa y turística que te aseguro que pronto tendré trabajo.

Lo miro fijamente y me río.

—¿Qué? —casi aspira buscando mi mirada con una sonrisa.

—Nada, nada... solo que dos meses atrás jamas me habría creído plantearme seriamente escaparme de un centro de conversión rumbo a sabrá Dios donde... con un chico.

—Pero no cualquier chico, conmigo.

Agacho la mirada a sus labios carmesí con una hermosa forma que es tan apetecible para el ojo humano.

En otro momento me habría reprochado por instar uno de los diez mandamiento que dicta la biblia: tener pensamientos y deseos impuros, pero han pasado tantas cosas consideradas pecaminosas últimamente que ahora poco esfuerzo hago por no cometer pecados.

Va limpiar el sillón con la tela de su camisa pero sin poder evitarlo no permito que lo haga tomándolo nuevamente de los hombros hasta atraerlo a mi y besarlo con ganas, con tantas ganas que parece mi cuerpo estar sediento y ardiendo después de días en el desierto.

Mi cuerpo se mueve y me aparto mordiendo mi labio cuando siento un poco de dolor.

—¿Qué pasa? —Mi cabeza volvió a recostarse contra el asiento del carruaje. —¿Te lastime?

—No —niego, es un dolor leve —es solo que supongo al ser mi primera vez tengo mi cuerpo sensible a cualquier movimiento.

Sarawat sonríe y vuelve a besarme pero con más cuidado, mi mano se resbala contra el vidrio, este esta completamente empañado.

—Ya quiero que nos vayamos de aquí.

Su mano se envolvió alrededor de mi muñeca antes de que pudiera responderle —¿Y como vamos a hacerlo?—algo más viene a mi cabeza y formuló la pregunta —, ¿como es que obtuviste las llaves hasta encontrarnos aquí?

—Te diré algo que vi pero no debes contárselo a nadie. —me entra la curiosidad cuando veo su mirada —Dim me las dio, y el va a ayudarme a escapar.

¿Qué? ¿Que es lo que está diciendo?

Me siento erguido de repente y eso causa un ligero dolor que me obliga a pegar mi cabeza a la suave colcha —¿Eres tonto? Probablemente es una prueba —Deslizo con fuerza mis dedos por la ventana para quitar todo lo empañado. Diviso si hay alguien pero afortunadamente aun no lo hay —deben estar vigilandonos, escucharon todo, ahora estan hablando con tus padres ¡o con los míos!, tal vez con los de ambos, soy un estúpido al venir aquí sin preguntar  ¡Dios eres tan idiota, seguro es una trampa! ¿Qué vamos a decir cuando...

1980 |Sarawat x Tine|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora