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Me despertó la alarma de Jake, como odio levantarme temprano, mi cabeza dolía como el infierno y, juro que morir parecía mejor opción que levantarme.

— ¿Qué hora es?

— Las doce.

— Mierda ¿A qué hora tenemos que estar allá? — pregunté con la ligera esperanza de poder dormir unos minutos más.

— A las tres.

Mis esperanzas se esfumaron rápidamente.

— Necesito una Gatorade y una ducha urgentemente — me quejé.

— Por favor, dime que sí tienes Gatorade — suplicó Jake con los ojos entrecerrados.

— Tengo ¿quieres algún sabor en especial?

— Lo que sea.

Fui rápido a la cocina, volví con las bebidas y fui a ducharme. De nuevo le dejé mi baño a Jake y yo usé el principal.

Había olvidado lo horrendo que es tener resaca, me dolía todo el cuerpo y la luz aumentaba mi dolor de cabeza.

Revisé mi cuerpo rápidamente mientras me duchaba, no tenía ninguna marca, al parecer Jake no es el tipo de chico que disfruta haciéndolas y lo agradezco profundamente.

Cuando volví a la habitación, Jake estaba vestido con su ropa deportiva, recostado sobre la cama curiosamente ordenada.

¿De verdad hizo la cama?

— ¿Quieres almorzar? Hay lasaña vegetariana en el congelador — ofrecí.

— Suena bien.

Al pasar por la sala de estar Jake se quedó mirando una foto, una horrible foto de Henry y yo en uniforme escolar, en mi caso, incluyendo una igualmente horrible boina verde.

— Era el primer día de clases y mamá quizo un recuerdo, — expliqué con cierta melancolía — no puedo creer que me haya puesto eso.

— Nunca había visto a tu hermano, lo imaginaba mucho mayor que tú.

— Cuando se hizo cargo de mi tenía solo veinte años — dije con cierta tristeza.

— Suena como si tu hermano fuera una gran persona — respondió Jake con una sonrisa.

— Lo es, en realidad nunca he entendido porque decidió quedarse conmigo — comencé a sentir que mis ojos picaban, pero sentía que Jake era el tipo de persona con quien podía hablar de estas cosas — sabes que somos adoptados ¿cierto? Solo vivimos juntos tres años antes de que el se fuera a Londres.

— Supongo que lo hizo porque te ama — la simpleza con la que Jake lo dijo me hizo sentir extraña, sabía que él tenía razón.

— Cuando fui a vivir con él me propuse hacerle las cosas lo más sencillas que pudiera, pero en cambio solo he complicado más su existencia, incluso tuvo que mudarse con toda su familia para cuidar de mi.

— Eso solo demuestra cuánto te ama y lo mucho que se preocupa por ti — Jake tomó mi mano con suavidad y se sintió reconfortante — no deberías sentirte culpable, estoy seguro de que es lo último que Henry quiere.

— Deberíamos ir a almorzar, no quiero que se nos haga tarde — dije sin mucho ánimo, Jake me sonrió y caminanos hacia la cocina.

— Esto está maravilloso — exclamó Jake tras probar la comida.

— La preparó Cami, siempre intenta guardar comida vegetariana para mi en caso de que ellos coman otra cosa.

— Suena como una persona muy dulce.

The wrong way IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora