Mi primer amor

Capítulo 9

-No lo vas a hacer-Dijo Ethan al lado mía.

-Oh claro que lo voy a hacer, mi madre me dejó.

-Te vas a estropear el pelo.

-Que exagerado. Ni lo voy a decolorar-Dije mientras cogía el bote donde contenía el tinte.

Hoy, 19 de diciembre, me voy a teñir el pelo de rojo. Así, a lo loco. Siempre quise ese color de pelo, es muy bonito además de que lo llevaba mi princesa favorita, Mérida.

-Para, para, ¡para un momento, Hazel!-Dijo agarrandome de la mano donde sostenía un frasco-.¿Estás segura de lo que quieres hacer?Tu pelo es muy bonito y nunca conseguirás el mismo tono. Y cuando se te vaya yendo el color se va ver feo-Dijo haciendo una mueca.

-Estoy segura-Decidí.

Asintió no muy convencido y proseguí con la mezcla. Menos mal que tenía instrucciones. Mientras preparaba lo que fuese eso, Ethan me miraba curioso y a la vez impactado. Yo también estaba impactada, nunca me había hecho un cambio tan drástico. Solo fui dos veces a la peluquería, el día que me hice el estilo wolf cut con un flequillo de cortina(que por cierto, ya me empezaba a crecer) y el peinado que me hice en la comunión.

-¿Por qué no dejaste que te lo hiciese un peluquero o peluquera profesional?-Preguntó.

-Porque no es tan divertido-Dije mientras removía la substancia que estaba en el frasco-.Ya está, listo.

-Bien. ¿Necesitas ayuda?

-¡Claro! Tu me vas a teñir por detrás.

-¿COMO?

-Comiendo-Sonreí-. Solo tienes que teñir todo, cada pelo.

-Uff...-Dijo agobiado.

Empecé a esparcir la mezcla por mi cabello hasta donde llegaba, mi pelo comenzó a tener un color rojizo aún sin haber llegado a lavarlo.

-Venga, ya puedes darle por detrás-Avisé.

Empezó a repetir mis movimientos anteriores mientras maldecía porque demonios me dio por teñirme el pelo un jueves. La respuesta era sencilla, mañana era el último día de clases hasta que terminase las vacaciones de navidad. Nos darían las notas(obviamente, aprobadas) y me iría a casa hasta que empezase el 2º trimestre. Esto es como el instituto, hay primer trimestre, segundo y tercero. El segundo ya nos advirtió David que iba a ser mucho más difícil  ya que no nos dió tiempo a hacer otro examen, el siguiente trimestre haremos 3.

-¿Estás más calva por aquí o soy yo?-Dijo él soltando una risita.

-Eres tú, imbécil-Maldecí-.¿Terminaste?

-Espera...-Hizo unos movimientos bruscos con la brocha y se apartó-¡Listo!

Era...raro. Mi cabello esta completamente pegado en mi cabeza y mi cara llena de tinte rojo. Empecé a limpiarlo deseando que desapareciera y dios me hizó caso.

-¿Como lo ves?

-Está todo cubierto, sería gracioso que cuando te seques el cabello, una parte del pelo sea de tu color natural.

-No sería gracioso, para nada gracioso.

-¡MIERDA!

-¿QUÉ PASA?-Pregunté asustada.

-¡LAS GALLETAS!

-¡LAS GALLETAS!-Repetí.

Habíamos hecho unas galletas para cuando viniera mi madre, le habíamos puesto chocolate por dentro y lo habíamos decorado. Solo faltaba que se quemase.