El otro día escuché que una mujer le decía a otra: «Si no caminaras así, no te mirarían». También vi como se reían de una a sus espaldas por la forma en la que estaba vestida. Así es como una se da cuenta de que el odio o peligro también se da entre mujeres. ¿Por qué?
Durante siglos, al parecer, la rivalidad creció debido a una necesidad de querer ser más "ejemplar" que otras. Al principio era una competencia de quién tenía la casa más reluciente o quién cocinaba mejor; con el tiempo pasó a ser una más caótica, oscura e innecesaria.
El voto se nos fue permitido, más oportunidades de trabajo se presentaron, se nos abrió la posibilidad de perseguir un sueño y crecer profesionalmente. Sin embargo, algunas en vez de alegrarse por sus compañeras femeninas, dejaron que creciera un roñoso rencor dentro de su alma. La palabra felicitaciones pasó a tener ningún sentido o sentimiento real. Por dentro se hacían la pregunta: ¿Por qué ella y no yo? Dejando que la envidia aumentara.
Personalmente, creo que todas alguna vez somos esa mujer que critica en vez de apoyar. Después de todo, el ser humano fue creado con muchas imperfecciones. No obstante, en más de una ocasión me he preguntado cómo seríamos todas unidas, pero verdaderamente unidas, sin críticas, ni prejuicios o envidias de por medio. Considero que así sería la única forma de lograr un cambio verdadero, ese que tanto estamos buscando para tener igualdad y paz. ¿Qué se necesita para llegar a eso? Apoyo mutuo, compañerismo honesto, ganas de pelear y alzar las voces para el bien.
Considero que llegó el momento de sentarnos a reflexionar, buscar dentro de nosotras mismas ese punto de calma y estabilidad, y dejar de lado todo lo negativo que la sociedad ha inculcado en el pasado. ¿Celos? ¿Para qué? No son nada más que un problema y una enfermedad. Valora lo que tenés, lucha por lo que querés para vos sin necesidad de ir tirando veneno hacia aquellos que no lo merecen. Tampoco digo que seas un ángel, pero sí hay que pensar bien el siguiente paso. Si queremos lograr un cambio verdadero, debemos empezar por nosotras mismas.
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El mundo de una mujer
Fiction généraleEn este libro se narran relatos ficticios, basados en hechos reales y casos que permanecen vigentes en el presente sobre experiencias que las mujeres han atravesado debido a su sexo y cómo son juzgadas por el mismo. Un llamado a la justicia e igual...