Regresar a casa para estar a salvo, pero el mal estaba más de lo que esperaba.
Ángeles "Mumi" Rawson vivía en Buenos Aires, Palermo, Argentina. Tenía 16 años cuando el portero de su edificio la asesinó.
El 10 de junio del 2013, los padres de Ángeles pensaron que, durante la tarde, estaba en la escuela como correspondía; al llegar la noche, no regresó. Llamaron a conocidos, amigos, incluso a la escuela, nadie la había visto. Sin embargo, la pesadilla recién estaba empezando.
Al día siguiente, en la mañana del 11 de junio, el cuerpo de Ángeles fue hallado por un empleado en la planta de residuos ceamse. Estaba atada de pies y manos, tenía una bolsa en la cabeza y una soga alrededor del cuello. A su vez, también se notaron golpes y señales de forcejeo.
Inicialmente, el principal sospechoso había sido el padrastro de Ángeles, Sergio Opatowski. Las personas y medios lo habían catalogado como una persona insensible por no haber llorado por Ángeles. No obstante, no se encontraron evidencias en su contra. Los ojos cambiaron de dirección cuando el portero del edificio, Jorge Néstor Mangeri, fue llamado a declarar pero no se presentó. En muchas ocasiones, Mangeri afirmó su inocencia, especialmente frente a las cámaras ya que hubieron persecuciones por parte de los medios durante el tiempo que la policía intentaba colocarlo en el lugar y tiempo del femicidio. No fue hasta que comenzaron a sospechar de su esposa como una partícipe que se presentó ante la policía para admitir por primera y única vez su culpabilidad. Luego de ese día, continuó sosteniendo su inocencia y decía que los golpes presentes en su cuerpo habían sido provocados por la policía con el objetivo de amenazarlo, cuando en realidad fueron proporcionados por Ángeles.
Las investigaciones crearon una idea de cómo el asesinato pudo haber ocurrido. Se dijo que, cuando Mumi llegó al edificio, se encontró con Mangeri y éste la persuadió de acompañarlo debido a que existía una confianza dado a la cantidad de años que trabajó allí. Luego la llevó hacia un lugar apartado del edificio donde intentó abusar sexualmente de ella. Ángeles se defendió y para callarla, Mangeri la asfixió.
Más tarde, tras una pobre autopsia, una junta médica se involucró para determinar la causa de muerte. Efectivamente fue por la estrangulación y sofocación que duró no más de cinco minutos; se encontraron cinco costillas fracturadas, al igual que su clavícula derecha y una vértebra. Ángeles también presentaba heridas paragenitales en una rodilla, la ingle y cara interna de los muslos, lo que confirmaron el intento de abuso.
El 15 de julio del 2015, dos años y un mes después, Jorge Néstor Mangeri fue condenado a cadena perpetua por el femicidio de Ángeles Rawson. Su caso se convirtió en uno de los más mediáticos en Argentina.
Este apartado es un llamado a la justicia, para que sea siempre dada y efectuada como corresponde. Es un llamado a las fuerzas para que sigan buscando pistas, evidencias, de los asesinos que siguen matándonos.
Ángeles Rawson fue vista por última vez con vida en una cámara de seguridad a las 09:50 A.M. Yo no perdono ni olvido.
Ángeles, nunca fuiste ni serás olvidada.
Ni una menos
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El mundo de una mujer
Fiksi UmumEn este libro se narran relatos ficticios, basados en hechos reales y casos que permanecen vigentes en el presente sobre experiencias que las mujeres han atravesado debido a su sexo y cómo son juzgadas por el mismo. Un llamado a la justicia e igual...