-Tu y yo contra el mundo- Valeria Garza x Reader

Capítulo 2

Me desperté, Valeria seguía dormida. Me levante y me puse mi pantalón de cargo y una musculosa blanca, tome mi arma y la puse en la funda, salí a saludar y a comer algo. Tome el desayuno que siempre nos daban, me senté junto a Alejandro y empecé a comer.

-Como dormiste?- Pregunté con pocas ganas

-Dormí bien, y tu? Pareces cansada.-

-Dormí bien, solo es que quería dormir más.-

- Si, lo se. Me pasa lo mismo siempre. Valeria está despierta?- Negué con la cabeza a lo que Alejandro me dio una llave pequeña, eran de las esposas que tenía Valeria. Entendí lo que tenía que hacer, así que fui a mi habitación y abrí la puerta. Valeria estaba sentada en la cama, mirando su pie. Vi gotas de sangre en el colchón y en el piso, las esposas le habían lastimado el tobillo. Me acerqué a ella, y me arrodillé. Tenía sus dos manos sobre la herida, me miro con desaprobación.

-¿Puedo?- Dije mirándola, a lo que ella sacó las manos, vi que tenía varios cortes por el metal de las esposas, agarre alcohol etílico, algodón y gazas.

-Esto te va a arder un poco, el agua oxigenada se me acabo.- Limpie la herida con el algodón mojado y ella gimió de dolor. Tome su mano para que la apretara, mala idea, no pensé en la fuerza que tenía ella, pero aun así trato de no apretarme mucho. Cuando termine de limpiar la herida, levante un poco su tobillo para poder darle la segunda vuelta con gaza. Al terminar, la ayude a ponerse las grandes botas con cuidado para que no se lastimase más. Le esposé una de las manos, tratando de que no le quedaran muy apretadas. Le busqué comida para ella y me senté en mi cama observándola. Tenía el pelo corto, el cual tapaba sus orejas y parte de su cara. Cuando termino, dejo la bandeja a un lado.

- Mi nombre es Sheila González, mejor conocida como "La Cobra". Se tu nombre, no te molestes en decírmelo.- Se me quedo mirando, y se acosto en la cama.

-Esta bien, me iré a seguir con mi trabajo, mis compañeros volverán a hacerte preguntas.- Me fui del lugar y comencé a limpiar las armas que habían dejado los muchachos que fueron a la última misión. Tome mi cabeza entre mis manos, estaba realmente cansada. Sentí la mano de Konig sobre mi espalda, éramos buenos amigos, hace un par de años nos gustábamos, pero decidimos quedar como amigos.

Más bien, él lo decidió. Yo lo amaba, pero él no a mi así que, no importa. Sonreí y dejé caer mi cuerpo para atrás, haciendo que mi cabeza quede colgando mientras estaba sentada en la silla. Sentí unos labios en el cuello, me asuste al
sentir eso, abrí los ojos y me paré.

-¿Que mierda estás haciendo?- Dije furiosa mientras lo miraba

-Pensé que querías que lo hiciera.-

-No Konig, mierda. Lo de nosotros termino, cosa que es mentira porque nunca existió, porque tú no querías, y al final, no te faltaba tiempo, te faltaban ganas.- Me fui dejando todo ahí, como estaba. Valeria ya no estaba, vi que las esposas estaban tiradas en el piso, así que la busqué por todos lados, me acerqué a la habitación de Alejandro y escuché ruidos, abrí la puerta y vi a Alejandro encima de Valeria.

-¿Pero que carajos?- Me quede inmóvil mirándolos, hasta qué reaccione y me fui cerrando la puerta de un portazo. Me fui corriendo a mi habitación. Ya era demasiado.

Narra Alejandro

Estaba charlando con Valeria sobre qué podría quedarse unos días en el cuartel, hasta que encontráramos el último misil y que encontráramos a Hassan, en un momento a otro me tropecé con Valeria, quedando arriba de ella. En ese momento escuché la puerta abrirse, era Sheila.

-¿Pero que carajos?- Dijo mientras nos miraba, hasta que se fue y pegó un portazo, escuché sus pasos rápidos, como si estuviera corriendo. Me levante rápido y me limpie el pantalón del polvo del piso.

-Lo siento.- dije rápido

- No pasa nada, fue un accidente.-

Me fui a buscar a Sheila y ella me acompañó, quería entrar pero le dije que no, preferiría que yo hable que con ella.

- Solo dile que fue un mal entendido, tampoco que son novios ustedes, o si?- Dijo Valeria, yo solo la mire, y recordé que ella no sabía que a Sheila le gustaba ella, no yo.

-No, solo somos amigos.-

-Entonces es más fácil, entra y dile.- 

Entre a la habitación y Sheila estaba acostada.

- Eres la última persona que quiero ver en este momento,  Vargas.-

-Sabia que me dirías así, oye Sheila. Fue un mal entendido, ok? Me tropecé con ella y quede encima, no estábamos haciendo nada, y tampoco haría nada con ella si se que ella te gusta.-

- ¡Ella no me gusta dije!- 

- Sheila, no sabes mentir.-  Ella solo me miro seria y me abrazo.

-Aléjate de Valeria porque te voy a dejar como colador de los balazos que te voy a dar.- dijo mientras reía, yo reí al unísono y nos separamos del abrazo.

- Ya se te pasó el enojo?-

- Digamos que si.- Nos abrazamos una última vez y salimos de la habitación, Sheila se le quedo mirando a Valeria y después se fue.

-Ahora está enojada conmigo?-  Pregunto Valeria.

- No, claro que no, ella no podría enojarse contigo.-  Dije y me fui dejando a Valeria con la palabra en la boca.

Narra Valeria

Alejandro y Sheila salieron de la habitación, Sheila se me quedó mirando pero no hizo ninguna mueca, solo me miro y se fue,  su pelo rojizo y largo hasta la cintura se movía con cada paso que daba, me le quede mirando un par de segundos hasta que desapareció entre la gente.

-¿Ahora está enojada conmigo?- Pregunté

-No, claro que no, ella no podría enojarse contigo.-  Alejandro me respondió mientras se iba, me quede sorprendida por su respuesta, a que se refería con eso?

Fui por el mismo lugar donde se fue Sheila, vi como charlaba con un hombre alto, creo que se llamaba ghost. Tome algo para comer mientras veía como se reía, parece ser amable con todos, bueno, lo fue conmigo que no me conoce de nada así que, supongo que si. Ella se dio cuenta de que la estaba mirando y me regaló una pequeña sonrisa, le devolví el gesto y dejó de mirarme, vi como se acercaba a mi y se sentaba a mi lado.

- Te gusta Alejandro?- Pregunté, me miro con asombro, como si esperara otra pregunta

- No, claro que no, solo somos amigos, pero si me gusta alguien.- Dijo con tono coqueto, mientras me miraba, yo no entendía, ella se levanto para irse, me quede inmóvil sin saber
que hacer, y solo observe cómo se alejaba de mi .

Holaaaa, les está gustando esta historia? repito, si ven fallas de ortografía ténganme paciencia que recién empiezo, espero que estén disfrutando de esto, muchas gracias que tengan una linda tarde ❤️