Colombian Girl »Lewis Hamilton

capítulo 2.

—Por favor, por favorcito no me haga nada —Sofia susurró

—¿Quién es ella? —Ángela preguntó confundida

—No me quiero morir aún —Sofía sollozó tapando su rostro —. Estoy muy jóven, tengo metas que cumplir, una familia al otro lado del mundo que espera que responda por ella, por favor

—¿Qué carajo está diciendo? —Ángela miró a Lewis —. ¿Qué le dijiste? ¿Qué le hiciste?

—¿Qué piensan hacer con el cuerpo? —Sofía murmuró sin poner atención a la rubia —. Bueno, dado que tal vez quieran extraerme los órganos supongo que poco quedará de mí —ella lloró aún más fuerte —. Favor no me hagan daño, de tantas personas ¿Por qué me eligieron a mi?

—Está loca —Lewis negó desconcertado

—¡¿Loca?! —ella se destapó la cara —. Hijueputa me trajiste hasta el auto sin preguntar, en contra de mi voluntad ¡Eso es secuestro!

—¿Qué? —Lewis frunció el ceño —. ¡Me estás tratando también de secuestrador!

—¡Un marihuanero secuestrador eres! —Sofia gritó y se lanzo sobre él

—Lewis pero que mierda —Ángela

—Saca tripas también —Sofía le dio manotadas

—¡Quitenme a esta loca! —Lewis forcejeo

—Loca tu mamá, imbécil —ella le dio una bofetada

—¡Estás demente! —Lewis la tomó de las manos y la inmovilizó —. ¿Sabés que puedo demandar te por agredirme?

—Yo te puedo demandar por secuestrarme —Sofia lo encaró

—Esto no es un secuestro —Lewis suspiró y apretó su agarré

—Me quieres robar los órganos —Sofia susurró

—¿Te quiero robar los órganos? —Lewis soltó una carcajada —. A ti ni un beso te robaría

—Sueltame, maldito imbécil —Sofia forcejeó

—Impactante —Ángela murmuró observando como sus rostros estaban tan solo a centímetros

—Jamás me dejaría besar por ti —ella resopló

—No dije que quisiera besarte —Lewis miró sus labios —. Un beso fue lo primero que se me vino a la cabeza

—Quí-mi-ca —Ángela susurró fascinada

—¿Qué quieres de mí? —Sofia preguntó

—Qué te quites de encima —Lewis dijo de manera cortante —. Eso quiero

—Yo... Eh —murmuró dándose cuenta que no debería haberse lanzado sobre él

—Estas evadiendo mi espacios personal —Lewis dejó caer sus manos con brusquedad

—Tu estás interviniendo en mi libertad —Sofia se alejó y regresó a su asiento

—Fue un error, me estaban persiguiendo —Lewis cerró los ojos con fuerza

Si seguía viendo y escuchando a esa mujer sus cabeza iba a explotar

—¡¿Ves?! —Sofia gritó —. Ni siquiera puedes negar que eres un delincuente

—¿No ves noticas? —Ángela preguntó con curiosidad

—Lo mismo le dije —Lewis respondió irritado

—No me alcanza para pagar la renta, menos para comprar un televisor —Sofia respondió

Todos en el auto se quedaron en silencio, allí comprendió que debía haberse quedado con la boca cerrada, pero ya había metido la pata, al parecer desde el inicio, así que eso no impidió que siguiera