capítulo 8.

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Sofía

Había ido a buscar a Lewis, sin embargo ¿En qué momento se distorsionaron las cosas?

Ahora solo habían miradas profundas, respiraciones pesadas y manos calientes...

—¿Ya te puedo soltar? —Lewis murmuró con una voz ronca

Ella solo pudo asentir

—¿Mejor? —le sonrió mientras quitaba su mano de su boca

Un frío la arropó, definitivamente hubiera preferido seguir con su mano sobre ella.

—Ahora ¿Piensas seguir? —elevó una ceja

—¿En qué estaba? —balbuceó

—Qué no eras suficiente —se cruzó de brazos

—Sí, exacto —asintió —. Soy común y corriente, no serviría para fingir ser tu novia —negó suavemente —. Agradezco tus ganas de ayudarme, eres muy considera

—Si vuelves a decir algo de ese tipo juro que te callaré con un beso —Lewis la miró a los ojos —. Creo que es la única forma de mantener tu boca ocupada y que no salgan estupideces

—¡Pero Lewis! —ella pataleó —. Soy muy insignificante para que salgas conm...

Los labios del inglés se chocaron contra los de Sofía, la besó duro y salvajemente, intentando arrancar las palabras de autodesprecio de su lengua

Mientras que sus manos le daban un toque de ternura, acariciando su cintura, su espalda y hasta irrumpiendo bajo su blusa para sentir su abdomen

—Entonces así se siente tocar el cielo —Lewis murmuró suavemente contra sus labios

Un silencio inundó la habitación, Sofía se encontraba inmóvil, con sus ojos cerrados y mordiendo su labio inferior, sientiendo aún el fantasma del beso con Lewis

—¿Te sientes bien? —Lewis la miró—. ¿Hice algo mal? —susurró

—No debiste besarme —ella abrió los ojos y conectó su mirada con los ojos marrones del monero

Porque ahora quiero más

—¿Por qué? —Lewis preguntó con curiosidad —. ¿No te gustó? Porque serías la primera mujer en decir una ridiculez de ese tipo, se exactamente como beso y mal no está en discusión

—Te equivocas —Sofía sonrió con satisfacción —. No me gustó, ni siquiera un poco

Me encantó

—Y no vuelvas a besarme

Porque podría acostumbrarme

—Por favor —Sofía terminó

—Solo te estaba callando —bufó —. Y debo decir que tampoco disfruté de ese beso —dijo afectado

—¿Sabés? —lo miró —. Acabo de darme cuenta que tú beso está en el top del peor beso de toda mi vida —sonrió —. Cómo siempre Lewis Hamilton primero en todo, siempre campeón

—Me estás provocando y no caeré en tu juego —exhaló

—¿Provocarte? —elevó su ceja —. Jamás lo haría, ¿Por quién me tocas? ¿Max Verstappen?

La furia le ganó y la agarró con fuerza ya agresividad de su nuca para besarla una vez más, pero ahora mucho más sucio que la vez anterior

Enterrando su mano en su cabello y con la otra atrapandola contra la puerta de la habitación, frotándose contra ella y con su lengua tendiendo una guerra por quien obtenía el control del rudo beso

Colombian Girl »Lewis HamiltonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora