El molesto amigo de james || Cole Sprouse Y Tu (TERMINADA)

Eres raro Sprouse

COLE SPROUSE

Han pasado dos semanas, traje mi ropa a casa de t/n y octubre ya estaba por acabarse, y oficialmente era mi novia, no era un tal vez, o sin compromisos, ella es mi novia.

Caminé hasta la sala de estar y t/n estaba viendo una película en el sillón, estaba envuelta en una manta viendo una película que parecía demasiado melodramática para mi gusto— ¿que ves preciosa?— me miró y le puso pausa— diario de una pasión— me senté en el sillón— has visto esa película unas diez veces desde que te conozco— arrugó el ceño— eso no es cierto— Enarqué las cejas— sabes que? No importa, quiero verla contigo— Su rostro se iluminó— En serio?— Asentí, se estiró en el sillón en el sofá y me tumbé sobre ella dejando mi cabeza en su pecho, con una de sus manos le hizo mimos a mi cabello y con la otra le puso play— está empezando, no te has perdido de mucho— Asentí y al poco tiempo me dormí, realmente tuve la intención de verla con ella pero sólo quería sentirla cerca además sus mimos me dieron sueño.

Desperté por que alguien me sacudió de los hombros, abrí los ojos y t/n me sonrió— me gustas— Se rió— eres raro Sprouse, pero también me gustas— Dejó un beso en mi mejilla, me senté y estiré mis brazos a mis costados— ¿quieres salir a alguna parte?— Parpadeó sentandoce en mis piernas— eres muy convincente Apa— la miré un rato— bien, ¿a donde quieres ir?— Con una sonrisa de oreja a oreja empezó a contarme que quería hacer picnic lejos de la ciudad eh ir en motocicleta, dijo también que ella de pequeña soñaba con eso en vez de que llegara un caballero en un caballo— podríamos aislarnos todo el día, compramos comida, tengo una canasta por ahí en alguna parte, y nos vamos, sólo tu y yo, ¿que dices?—

—Digo, que haremos eso guapa— se emocionó y dejó besos por todo mi rostro, ella fue a darse una ducha y vestirse en lo que yo hice un par de llamadas y alquilé la motocicleta, porque la mía está en New York— escuché cómo abrió la puerta de su habitación— te juro que no tenía idea de que podías alquilar una motocicleta por un día, ¿tu lo sab... vaya— La vi frente a mí, tenía unos pantalones cortos negros y un crop top del mismo color, su cabello estaba lacio y traía zapatillas blancas— te veo y no creo que alguien cómo yo esté con alguien cómo tú— Se rió— tu espejo está roto entonces— Se acercó y dejó un casto beso en mis labios— ahora ve y ponte una camiseta, me gustas así pero sólo yo puedo ver tu lindo abdomen— Entrecerré los ojos— mi lindo abdomen está en la television nena— negó con la cabeza— el lindo abdomen de Jughead está en la television, el de Cole es sólo para mí— Me reí y caminé hasta la habitación— ¿recuerdas cuando me dijiste que no eras celosa?— Me dió una mirada asesina y entré rápido a la habitación.

Los brazos de t/n rodeaban mi torso, estaba pegada a mi espalda, llegamos a un lugar que parecía ser un campo pero aún se veía la ciudad si subias a una de las colinas, paramos ahí, sacamos la canasta y subimos una colina donde había un gran árbol, t/n iba a sentarse y entonces vi la foto perfecta— No te atrevas a moverte— Quedó inmóvil— Cole ¿que sucede?— Saqué la pequeña cámara que llevo a todas partes— No te muevas, eres mi musa—
Sonrió por un segundo y no se movió, tomé un par de fotos hasta que me decidí por una— ¿Listo?— preguntó aún sin moverse— si, ya está— se puso de pie y miró la cámara— eres bueno en eso— Le dí una sonrisa de boca cerrada, puse un mantel en el suelo y nos sentamos a comer.

—Entonces... ¿estás diciendome que Dylan hizo que cayeras del techo?— Asentí y empezó a reír a carcajadas con la papa frita que planeaba comer en su mano, sonreí, amo verla reír, creo que es el momento más hermoso de nuestras conversaciones, algo dentro de mí da saltos de emoción cuando la hago reír. — Necesito conocer a tu hermano— Afirmó y comió la papa— vas a conocerlo, diría que igual que yo conocí al tuyo pero cuando te conocí ya conocía a tu hermano— Sonrió— Cole— tomó mi rostro entre sus manos y me miró con los ojos entrecerrados— necesito besarte ahora— Me reí me besó causando eso indescriptible que siento cada vez que me besa— Bien, no más cerveza para ti— Hizo un puchero— si te hace sentir mejor, para mí tampoco porque tengo que llevar esa moto sin un rasguño— Sonrió— Tengo una idea, una muy rara idea— Amo sus raras ideas— te escucho

— ¿Y si dormimos aquí? Digo en un rato va a oscurecer y supongo que no hay animales carnivoros por aquí— Me reí— no, no los ahí— Lo pensé un poco— te va a dar frío— negó con la cabeza— vas a estar incómoda— repitió la acción— segura? Si en algún momento quieres volver a casa, podemos hacerlo— Asintió, sonrió con malicia y entendí porque lo había hecho cuando empezó a rodar cuesta abajo, tuve que seguirla corriendo para que no se diera un mal golpe— Algún día harás que me dé un infarto Gigiana— me miró mal y me reí— estamos a mano— le ofrecí mi mano y la estrechó para ponerse de pie— como quieres Mitchell— La miré entrecerrando los ojos— Mala decision chica— Empezó a correr meintras la perseguía, una piedra pequeña se atravesó en su camino y cayó al suelo— ¿estás bien bonita?— empezó a reír lo que me dijo que estaba bien, me acosté sobre ella sin dejar caer mi peso para empezar a hacerle cosquillas— Cole no... para por favor— Habló sin poder parar de reír— Eso es... tra-trampa— Me cansé y también riendo me tumbé en el pasto a su lado— El tiempo contigo se pasa tan rápido— habló y entrelazé mi mano con la suya— A veces, repito todo en mi mente y no volvería a alejarme de ti tanto tiempo—

Eso es un alivio

—Pero no me arrepiento, si eso no ubiese pasado, tal vez no estaríamos aquí, no nos dimos cuenta de cuanto nos necesitabamos hasta que nos faltó el otro— Es otra cosa que me gusta de ella, casi nunca habla de cómo se siente, por eso entiendo que aún no me haya dicho que me ama, sé que no es porque no lo sienta, me demuestra que lo siente pero también entiendo que le cueste decirlo— Y no quiero que nunca me faltes— Habló y nos acostamos de costado para vernos a los ojos— nunca más voy a faltarte— metí un mechón de cabello detrás de su oreja, me dio una sonrisa dulce y pasamos unos 20 o 25 minutos hablando y mirándonos. Volvimos hasta donde estaban nuestras cosas porque empezaba a oscurecer— ¿Segura que quieres dormir aquí?— volví a preguntar
— Si, estoy segura— Asentí y sacó una manta de la canasta sonriendo— ¿así que tenías esto planeado?— se encogió de hombros— tal vez.

Negué con la cabeza riendo y nos recostamos en en pasto— sabes, me gusta esto— Sonreí y poco a poco se durmió, yo sólo me pude dormir cuando ella estuvo dormida.

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Actualización d la semanaa, espero le haya gustado

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Lxs quieeero

Muak muaak<3

O.S.