Capítulo 104

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"No puedo. Jihan-ah, pidamos una botella más de cerveza y soju".

"Ah, ¿de qué estás hablando? Tus ojos se están cansando".

"Hoy, el alcohol se siente bien, así que necesito beber más".

"Luego te arrastró de regreso a casa. Estoy seguro de que hay bastantes personas que te reconocen ahora, ¿quieres un artículo?"

Cheongyeon ignoró las palabras de Kim Jihan y bebió el alcohol restante de la botella. Y luego pulso el botón de llamada.

"Uh, ¿por qué no se está presionando esto?"

Originalmente, debería haber sonado un ding-dong, pero no importa cuántas veces lo presioné, estaba en silencio.

"loco. Ese es el patrón de mi celular".

"Ajá. ¿bueno?"

Cheongyeon trató de fingir estar tranquilo y asintió con la cabeza. Sin embargo, como dijo Kim Ji-han, es posible que ya haya alcanzado el límite de consumo de alcohol cuando vio el objeto frente a sus ojos partiéndose en dos.

"Oye, ¿no me digas que te caerás?"

"No me caigo".

Cheongyeon negó con la cabeza mientras estrechaba la mano de Kim Jihan.

"¿No es ese Yoo Cheong-yeon?"

En ese momento, alguien en el bar miró hacia la mesa donde estaban sentados Cheongyeon y Kim Jihan.

"¿En serio?, el actor. ¿Dónde?"

"¡Guau! Es verdad".

"¿No es solo alguien que se parece?"

Cuando una persona comenzó a reconocerlos, la mesa inmediatamente se volvió ruidosa.

Ahora que lo pienso, ¿está bien que se quede aquí así? La pregunta pasó por la mente de Kim Ji-han como un relámpago. Miró a Cheongyeon, cuya conciencia se estaba desdibujando gradualmente, con ojos ansiosos.

"Ay dios mío. Incluso las celebridades vienen a bares como este".

"¿Vamos por un autógrafo?"

A diferencia de Kim Ji-han, que tenía prisa como una persona arrinconada, el borracho Cheong-yeon no parecía importarle mucho la mirada de la gente.

De todos modos, Kim Ji-han, que decidió cambiar de asiento, se levantó de un salto y causó revuelo.

"ey. ¡Vamos, Kang Dae-chang! ¡despierta!"

"¿Quién es Kang Dae-chang? . ¿Por qué tu nombre es así?

Cheong-yeon, que estaba retenido por Kim Ji-han, murmuró como si fuera absurdo.

"Cállate y vete a casa, Dae chang. No podré ir a una tienda como esta la próxima vez".

No habría entrado si hubiera sabido que era un bar. Él respondió con una pequeña voz que parecía casi inaudible.

Fue frustrante que su voz no saliera como quería, probablemente porque se estaba emborrachando.

"Lo llevaré."

Entonces, la voz de una mujer de repente interrumpió.

Parecía que estaba discutiendo con Kim Ji-han, pero su conciencia se estaba desdibujando gradualmente y no podía oír bien.

Tenía mucho sueño y su cuerpo estaba pesado.

*

El sonido de los platos traqueteando perturbó sus oídos. Cheong-yeon, que estaba profundamente dormido, frunció el ceño ante el ruido intrusivo que continuó durante varios minutos.

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