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| ႮΝᎪ ᎡϴՏᎪ ᎷᎪᎡᏟᎻᏆͲᎪ |

しᗩᎩᏆᑎᏀ:

➣Niji no kanata ni

➳EUGEO

Algunos meses atrás...

¿Qué pasó? ¿Dónde estoy?

¿Por qué duele...? ¿Por qué duele si no estoy herido? Sentía un dolor profundo en mi pecho, era como si una daga hubiese atravesado mi corazón. Llevé mi mano a mi pecho para sostenerlo y apretarlo duro para tratar de detener ese dolor; sentía mi cuerpo vacío, como sí fuera solo una hoja vacía y botada. Era como si ese vacío que sentía me estuviese doliendo entre tantas dagas que sentía clavadas en mi corazón. Me aferraba a abrazarme a mí mismo para obtener un poco de calor, pero era inútil. Era como estar en el mismo invierno recostado en uno de sus hielos eternos. Mi vista no tardó mucho en enfocar a mi espada.

La espada blue rose. La Rosa azul que había sobrevivido a la tempestad del invierno. El hielo eterno que lo congela todo.

Extendí mi mano temblando para tomar el mango de la espada y acercarla; estaba fría, era como agarrar el mismo hielo, pero aún así lo sujete tan fuerte aferrandome a ella. Las lágrimas gruesas no tardaron en llegar; era insoportable estar en éste lugar gélido.

-Alice... Kirito. -Murmuré con dificultad.

No he sabido nada de ellos... Mi siguiente recuerdo había sido despertar en éste solitario lugar; tal vez y mi destino haya sido estar aquí... Fui un ingenuo al pensar que tenía a Kirito y Alice. ¿Por qué siempre tengo que estar solo?

El dolor de ese vacío hace que el dolor se incremente más y de mis labios suelto un gemido de dolor, sostenía fuertemente mi pecho mientras mis lágrimas salían por si solas; suplicaba que ésto pare, que el dolor de detenga. Mi vista se posó en la espada... Quería que el dolor se detuviera y sólo había una forma de hacerlo. Sostuve el mango de la espada e hice el intento de bajar hasta la punta y acercarla a mi pecho. Mis manos estaban temblando, ¿de verdad debo de hacerlo? Mi cuerpo poco a poco se marchitara, y dudo mucho que a alguien le llegue a importarle.

-¿Qué intentas hacer?

Levanté la mirada para ver el dueño de la voz... Para mi sorpresa era yo, con la diferencia que tenía una mirada fría y una armadura peculiar como los Caballeros de la integridad.

-¿Quién... Eres tú? ¿Acaso... Eres... Una... Ilusión?

Él ladea la cabeza.

-Yo soy Eugeo Synthesis thirty two. -Él se agachó para verme-Habité este cuerpo por unos breves momentos, por lo cual tengo el derecho de salvarlo.

-¿Sal... Salvar? -Tartamudeaba. El dolor cada vez era insoportable y hacia que mis palabras se quedaran atacadas en mi garganta. -¿Tú... Sabes que... Es...?

-Estámos en tu conciencia. -Me respondió antes de acabar la pregunta.

¿En mi conciencia? ¿Cómo es eso posible? No estoy entendiendo nada.

-Debemos darnos prisa, tienes que despertar.

Había parpadeado un par de veces, poco a poco su imágen se iba siendo borrosa. Él me sacude intentando que no cierre los ojos, su voz me decía "no cierres los ojos". A través de pequeños esos podía escuchar a alguien recitando algo... Como un hechizo o algo en particular y eso poco a poco me iba a adormeciendo. Sentía como algo empezaba a en volver mi cuerpo, parecían ramas llenas de espinas, veía a él atacando las ramas para liberarme.

Rosa marchita ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora