Resultado de las hormonas.

Part 4

El desconcierto abordaba el rostro de cuatro de los presentes que estaban en la cocina, incluso dos de ellos hicieron el amago de limpiarse las orejas ante lo que habían escuchado.

- ¿Cómo demonios planeas decirle a Mihawk que estas en espera? - gritó el peliverde hacia quien se suponía era su hermano mayor.

- ¿Qué mierda?, ¿por qué carajos me preguntas a mí eso cuando tú te encuentras en la misma situación? - apunto el omega pelirrojo.

- Esperen un momento, podrían explicar eso de que son hermanos antes de continuar con su pelea - pidió Nami pues aún seguía muy confundida y sorprendida.

- Agh, ese cabeza de lechuga - empezó a decir Kid mientras señalaba a Zoro - es mi hermano menor por así decirlo, su padre biológico fue el maestro de kendo de mi padre Mihawk, por circunstancias que desconozco hasta ahora, solo sé que mis padres lo tomaron bajo su tutela cuando Roronoa tenía trece años - explico sin más Eustass.

Todas las miradas expectantes se dirigieron esta vez al alfa que miraba hacia cualquier lugar que no fuera a las personas que lo rodeaban, pero un golpe en la cabeza dado por un rubio omega le hizo saber que debía concretar las palabras que había dicho Kid.

- Cuando tenía trece años, mi padre Koshiro y mi hermana Kuina habían salido en un viaje hacia una pequeña ciudad donde se llevaría acabo un combate de kendo donde participaría ella, ese día yo me quedé en casa pues me había presentado recién como un alfa y mis hormonas estaban en una pelea de balance, esa noche llamaron a la mujer que me cuidaba para informarle que Koshiro y Kuina habían tenido un accidente en la carretera, ninguno sobrevivió así que el estado estaba a punto de tomarme bajo su tutela hasta que Dracule Mihawk y Akagami Shanks se presentaron diciendo que ellos habían sido declarados como apoderados míos así como de mi hermana si algo le llegaba a pasar a mi padre, desde ese entonces comparto mi vida con la fresa idiota - relato Zoro mientras apuntaba a un molesto omega por el apodo dicho.

- Un momento, si se supone que Kid es hijo de Mihawk y Shanks, ¿por qué no lleva su apellido? - cuestionó Niji curioso al escuchar los apellidos de la pareja.

- Mi madre era hermana de Shanks, falleció a manos de quien se dice ser mi progenitor así que Akagami tomo mi custodia cuando apenas era un cachorro de siete meses, en ese entonces apenas había iniciado su relación con Dracule, así que se vieron obligados a dejarme el apellido del bastardo ese, me acostumbre a ello así que no quise cambiarlo - respondió el mayor entre los omegas.

- Volviendo a lo nuestro, Shanks nos va a matar cuando se entere de lo que está pasando - recordó Zoro mientras un escalofrío recorría su cuerpo.

- A ti te matará por idiota descuidado, y a Niji por tocar a su pequeño cachorro omega - dijo con fingida inocencia el pelirrojo.

- Una cosa por día, mañana recogeremos los estudios que fuimos a hacernos esta tarde, no saquen conclusiones apresuradas no es como que haya algo que confirme de manera oficial que Nami, Kid y yo estamos gestando - explicó Sanji en un intento de excusarse un poco a él y los otros dos omegas.

- Tú, ella y él huelen a miel, el olor característico de un omega en estado de gestación - apuntó Reiju con obviedad.

- Eso explica porque de repente tenías un olor más dulce cejillas - declaró Roronoa.

Un golpe relativamente fuerte pudo escucharse, los tres omegas se encontraban con las frentes pegadas a la mesa, ni siquiera haría falta que fueran por los resultados, pues Vinsmoke Reiju, futura farmacéutica había confirmado las sospechas que tenían desde esa tarde.

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Trafalgar D. Water Law jamás había tenido miedo de nada, pero esa mañana las cosas cambiaron.

Después de pasar con la enfermera encargada de las pruebas de sangre, y recoger los resultados de un examen que le habían hecho ayer por lo que sabía a Luffy y unos cuantos de sus amigos, la curiosidad sobre que se trataba fue tan grande que abrió el sobre que tenía el nombre de su novio.

La hoja era clara, no había error alguno, el nombre del omega pelinegro aparecía en las primeras líneas, el tipo de sangre y el tipo de prueba que se había hecho podía leerse, claramente el resultado que resaltaba con letras de un color oscuro intenso decía la palabra que aún no terminaba de creer.

POSITIVO, se leía con claridad, sus manos temblaban un poco, su novio, su pareja estaba en estado de gestación.

Importandole muy poco el posible regaño de Marco, tomó su abrigo que había colgado hace poco tiempo y salió azotando la puerta de su consultorio, entonces a los otros cinco omegas les habían realizado la misma prueba, eso tenían que saberlo inmediatamente, maldecía cada momento el día que acepto la invitación de Sanji a esa fiesta en la casa de los Charlotte.

Llego al campus universitario, estacionó su coche, camino hasta la oficina del director para pedir que llamara a los seis omegas involucrados en la situación.

Aokiji miro con seriedad al hombre que tenía frente a él, lo conocía bastante como para saber que se trataba de Trafalgar Law, un sobresaliente alumno que hace apenas un año se había graduado de la carrera de medicina.

Le pidió a su secretaria Hina que fuera por los estudiantes mencionados por Trafalgar, indicándole que los llevará al laboratorio del segundo piso.

Ninguno de los llamados entendía lo que sucedía pero ahí se encontraban siguiendo a la secretaria escolar hasta un laboratorio, apenas abrieron la puerta, un hombre que algunos ya conocían estaba sentado en un banco del lugar.

- Torao - llamó con alegría un omega pelinegro lanzándose en un abrazo hacia su pareja.

- ¿Cómo estás Lu? - preguntó el alfa revolviendo sus cabellos de manera amorosa.

- Bien - respondió con su característica sonrisa el menor.

- ¿A que debemos tu presencia Law? - pregunto Sanji.

- Debido a esto - respondió el médico mientras levantaba los seis sobres que tenían el nombre del hospital donde trabajaba.

- Mierda - dijeron al unisono los seis omegas.

Cada uno tomó el sobre que contenía su nombre, Luffy miro extrañado el suyo pues ya estaba abierto, vio rápidamente a su pareja e inmediatamente comprendió que Trafalgar había leído sus resultados.

Sacaron aquella hoja que finalmente confirmaría sus sospechas, cada uno la leyó con detenimiento pero apenas vieron el resultado dos cayeron desmayados mientras que otros alcanzaron a soltar un grito antes de sentarse en el suelo.

Law vio con terror la escena que sucedía frente a él, se levantó para revisar a los dos omegas que estaban inconscientes en el suelo, tomó su pulso, su temperatura y su reacción ocular, todo parecía bien en ellos.

Con ayuda de los demás los acomodaron sobre una manta, solo debían esperar hasta que despertaran para después irse a sus hogares y descansar un poco.

El alfa veía con intriga a su pareja, el omega no había dejado de sonreír desde que había leído su resultado positivo.

- ¿Qué sucede Luffy-ya? - preguntó el mayor.

- El hijo de Torao está creciendo aquí - respondió alegre el menor mientras señalaba su plano abdomen.

Trafalgar solo cubrió su rostro con una mano, sonrojandose furiosamente ante lo tierno que se había visto su omega mientras pronunciaba esas palabras, Law solo decidió abrazar a su pareja con una pequeña sonrisa en su rostro.