El Desastre De Dereck

Capítulo 14

DERECK

—¿Dónde tan arreglado? —me detuvo la voz de Brithany antes de salir de la casa —¿Tan temprano? ¿Vas a alguna boda?

—A un funeral, de hecho. —respondí.

—¿De quién?

—El mío. —dije.

Abrí la puerta y antes de que ella dijera algo salí de la casa.

Subí a mi auto y me mentalice todo lo que haría. Iría a completar una carrera y luego me iría al ridículo baile de Grace, pero antes tenía que quitarme la carga de Meredith.

Ella me estaba esperando en su casa para hablar de no sé qué, pero no iré, cuando voy a su casa las cosas nunca salen bien, se me complican y estoy cansado de estar metida en sus líos.

Encendí el auto, pero fui detenido por mi mamá, ella ladeo su cabeza y se acercó a la ventana donde estaba yo. Baje la ventanilla y me miro con curiosidad y asombro.

—¿Dónde vas, Dereck? —me miro.

—Vendré pronto.

—Pregunte que a donde ibas.

—Con una chica. —dije.

—¿Como una cita?

—Algo así.

—¿Es tu novia o algo así?

—Supongo que lo es. —dije.

Mamá sonrió viéndome, orgullosa de que tenía una cita, pueda que le entienda, no soy de contarle mis cosas de que tengo alguna cita o ese tipo de conversaciones, prefiero aislarme y ser solo yo y mis desastres mentales. Al menos, nunca le he presentado una novia a mi mamá.

Ella lo sabe, ella me conoce muy bien.

—Me alegra, Dereck ¿Me la vas a presentar?

—No por ahora, quiero ver si esto es serio. —dije.

—Bueno, llévale algo. —dijo mamá. Miro la bolsa plástica donde venían las compras y me extendió una barra de chocolate —Dale un chocolate, a las chicas nos gustan los chocolates.

—Se lo daré. —acepte la barra.

—¿Estarás para la cena?

—No creo.

—Avísame cuando vengas, por favor, Dereck.

—Lo hare, mamá

—Y ten mucho cuidado, no te metas en problemas. Recuerda, sentirse mal es algo natural en los seres humanos.

—Estoy bien, mamá. Ya lo tengo controlado.

Ella me miro, sonrió y asintió. Dio un paso hacia atrás dándome espacio, encendí el auto y empecé a alejarme.

Maneje sin mirar atrás, tenía mi noche planificada, podría ser un imbécil y descartar la idea de ir con Grace, porque si soy honesto solo le di un espacio a mi noche, porque no es nada interesante ir a un baile con una chica, pero como dije antes, ya la había dejado mal una vez. Tenía que recompensar eso.

Aparte, la chica literal me está pagando para ir a ese baile.

Deje que la muisca de The Neigbourhood me acompañara mientras que por la carretera podía ver como el cielo tenía un color naranja. Un atardecer.

Tenía que estar a las seis de la tarde donde seria la carrera de hoy, y estaba muy molesto, no tenía pensado en venir, pero tenía un compromiso y ahora tenía que resolver eso.