Maldición de la diversión

Canto 3

―Esto tiene que ser una mala broma.

― ¿Por qué lo sería?, no es como si pudiera faltar tres días seguidos, digo, ¿no crees que ya sería sospechoso? ―Merlín sonrió mientras que terminaba de atarse la pequeña corbata que tenía su uniforme, la corbata estilo listón desarreglada.

Emiya sintió como su ceja se movió en un tic nervioso ante la vista desalineada que tenía de Merlín, la joven no tenía arreglado para nada su uniforme, la capa negra que tenía estaba arrugada y la corbata fue mal atada.

―Bueno, no pensé que te preocuparía demasiado lo de ir a la academia... ¿Qué tanto saben estos demonios de ti? ―Emiya se sentó en la silla de la cocina. Merlín había bajado y ahora estaba en el comedor con un gran desayuno que el propio Emiya había hecho sin pensarlo.

Se arrepintió cuando se dio cuenta para quien estaba cocinando.

―Quería pasar desapercibida a primera, pero tenían a una niña molesta.

― ¿Niña molesta?

―Una yokai, es una nekomata, una variante, es bastante especial la verdad, no pensé que podría sentirme, al parecer son sensores de nacimiento, descubrieron que tenía sangre de demonio a primera instancia.

―... ―Emiya se quedó mirando a Merlín quien se sentó frente a él―, eso es patético.

―Si lo dices de esa forma duele, ¿sabes?

―Entonces lo estoy haciendo bien.

―Eh... entonces quieres ser el activo, bien, estoy bien con eso~ ―la albina comentó con un tono juguetón.

― ¿No puedes dejar de ser sugerente por un minuto? ―Emiya rechistó ya con molestia. Ni siquiera habían intercambiado más de un par de palabras y ya hubo otra propuesta de la mujer.

La risa de Merlín estalló ante el comentario de Emiya.

―Sabes, para ser alguien que ha vivido tanto tiempo que ni siquiera vale la pena pensarlo, eres bastante emocional ―la sonrisa de Merlín se quedó más pequeña a cada segundo después de eso―, es eso lo que buscas que diga, ¿no?

―No tengo idea de lo que dices mujer loca.

―Imitar emociones es algo que sé muy bien, es casi perfecta tú máscara de emoción, pero soy bastante sensible a las emociones humanas ―Merlín llevó una mano y abrió un poco más su ojo derecho como si fuese un aumento―, puedo distinguir las emociones como si fuesen colores, es solo un decir, si quisiera comparar solo veo un gris pálido de tu lado, no hay nada, es un color bastante curioso, porque es el color de un cadáver.

Ahora la sonrisa de la mujer era una que prácticamente le decía a Emiya, "sé más que tú".

―Estás loca mujer.

―Es casi como ver a un homúnculo antes de ser programado, imitas emociones, me cuesta creerlo por más que lo veo ―Merlín tomó un tenedor y clavó en la comida que tenía delante―, dime, ¿siempre has sido así?, no tienes emociones, por mí lado puedo decir que intento comprender a los humanos, pero mi parte demonio se niega a estar en cercanía, así que no puedo verlo, pero tú...

―Fui humano, sigo siendo uno.

―No, no lo eres.

― ¿Ahora vas a comenzar a teorizar sobre mi nacimiento? ―Emiya vio como Merlín llevó una la comida a la boca y abrió los ojos con asombro. Vio a la mujer sus piernas y cerrar los ojos.

―Ah... ―fue casi un jadeo, uno de placer, Emiya solo miró aquello con el rostro arrugado y molestia presente en este―, de verdad... podría comer esto por la eternidad...