Acto 2

1.5K 212 293
                                    

Lo vio.

Aquella mano extendiéndose, la forma en la que se le mostró una amabilidad que no le pertenecía, una oportunidad que había perdido.

Un intento que él mismo se había arrebatado.

―Issei-sama.

El llamado hizo que alzara la cabeza y viera a la mujer que lo estaba viendo desde arriba, de pie por encima de él quien se encontraba en el suelo llorando arrepentido de sus acciones.

Un ticket para una nueva oportunidad.

Una invitación y una sonrisa, una promesa y la promesa de grandeza, no fue una amenaza o una burla, fue una forma de mostrarle como estaban dispuestos de ir tan lejos para hacer algo por él.

Aquel fue un nuevo regalo que se le brindó para una nueva pelea, para una nueva oportunidad de mostrar su valor, para una nueva oportunidad de triunfar donde había caído.

Una nueva oportunidad de lograr lo que había conseguido.

―Se le dará la bienvenida en la fiesta y el hermano de Rias espera su participación activa.

Palabras que para Issei fueron un nuevo aire el cual respirar, algo nuevo por lo cual sujetarse y algo por lo cual levantarse.

No pudo decir nada más, al momento de tomar la carta de invitación la mujer le había sonreído para luego desaparecer.

Usualmente Issei hubiera opinado sobre el porte de la mujer, como la vista superior hizo que se resalte el pecho de aquella mujer que conoció bajo el nombre de Grayfia.

La mujer tenía uno de los mejores pechos que había visto de momento y fue algo que lo desconcertó la primera vez, pero en esta oportunidad en donde solo podía alzar su mano en duda de sus propias accione y el logro dado.

Solo se centró en lo que lograría próximamente con la venidera victoria que estaba no solo obligado a cumplir.

Si no que fue una imposición que estaba por encima de él.

"Se dice que la mayor fuerza de los héroes viene de aquí..."

Los ojos de Issei se agrandaron cuando llegaron palabras que se le había dedicado con anterioridad. Palabra dadas por aquella joven tan amable que vio a todos como iguales y como personas a las cuales tratar con amabilidad.

¿Cómo podría decepcionar a Mari Wyllt? Issei se preguntó al instante en que la imagen mental del rostro de la joven sonriente vino a su mente.

No había forma en la que no tomara aquel consejo dado para él, Issei lo pensó, lo que podría llegar a ser y las implicaciones que tendría, Ddraig había hablado de un brazo pero también expresó la posibilidad de entregar un corazón a cambio de un poder más inestable.

La diferencia era el tiempo y la forma en la que podría suprimirlo, no sería lo mismo que un brazo de dragón pero no importó.

―Usaré mí corazón para extraer la fuerza que crees que tengo Mari-senpai ―Issei se puso de pie y apretó el puño izquierdo libre, miró hacia el frente con una mirada seria y una sensación que no había experimentado hasta ahora.

Un deseo de superación absoluto más allá de lo que sintió en la pelea.

Llevó la mano libre a su corazón y lo pensó detenidamente.

No habría vuelta atrás.

Eso fue lo que dijo Ddraig.

No escuchó.

Accedió a un contrato que desconocía y apretó los dientes para comenzar con aquel movimiento que iba a ser el ganador después de su previa derrota.

Issei se preparó para ir hacia el frente sin pensar en nada más que la victoria.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 02 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Maldición de la diversiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora