𝙰𝚃𝙴𝙴𝚉: 𝙷𝚊𝚎𝚗𝚊

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- Dios, estoy tan jodidamente cansada - dijo Haena, recostándose en el suelo. Estaba cansada como el resto de ellos, prepararse para Kingdom y un regreso al mismo tiempo fue mucho más desafiante de lo que cualquiera de ellos había pensado originalmente. Si no estaban practicando la coreografía, estaban en lecciones vocales, si no estaban en clases de canto, estaban en una prueba de vestuario.

Si no estaban allí, estaban comiendo, si no estaban comiendo, estaban durmiendo la mayor cantidad de tiempo posible. Ni siquiera habían tenido la oportunidad de disfrutar del nuevo dormitorio juntos con lo ocupados que habían estado

- Vamos, vamos a comer muy rápido antes de la clase de canto  - Wooyoung le tendió la mano y ella la agarró, dejando que levantara todo su peso.

En el salón, colocó una taza de fideos frente a ella, que devoró a una velocidad récord - ¿Incluso probaste algo ? - Wooyoung dijo y Haena solo se encogió de hombros, tomando un sorbo de su agua

- No hay tiempo para probar nada Wooyoung-ie. ¡Tenemos que movernos, movernos, movernos! - Wooyoung gimió, encorvándose en la silla y cerrando los ojos.

- Estoy tan cansado, Haenie- se quejó y ella suspiró, levantándose y sentándose a su lado

- Lo sé bebé. Pero podemos hacer esto, sé que podemos - Wooyoung solo volvió a gemir y ella le envió una sonrisa cansada.

Sabía que todos estaban agotados y odiaba ver a todos tan cansados, pero también sabía que no lo cambiarían por nada. Se atarían cuerdas entre sí y continuarían hasta que todos colapsaran.

-Está bien, tengo una idea - dijo Haena, mirando a su alrededor para asegurarse de que Hongjoong o Seonghwa no estuvieran cerca 

- Nada que implique actividad física, por favor - rogó Wooyoung y ella le dio una palmada en la rodilla, el la miró. 

- Tenemos 20 minutos antes de que comience la clase, escapémonos y tomemos una siesta - No había visto la cara de Wooyoung iluminarse tanto como ahora en toda la semana.

- Conozco el lugar perfecto, ¡vamos!-  La agarró de la mano y tiró de ella. Le dolían las piernas y deseaba que se calmara, pero sabía que decir algo, no lo detendría. Estaba decidido a tomar una siesta e iba a hacerlo lo más rápido posible. Afortunadamente, rápidamente terminaron en el lugar del que aparentemente hablaba Wooyoung.

- Woo - Haena arrugó la nariz mientras miraba alrededor de la pequeña habitación - este es un viejo armario de utilería - Tarareó, sacando un tapete de la nada junto con dos almohadas y una manta gruesa.  - ¡¿D-dónde conseguiste eso?! - No había forma de que un colchón, almohadas y mantas estuvieran dando vueltas por ahi. Especialmente si no estaban llenos de polvo también.

- Mingi y yo usamos mucho esta habitación para escabullirnos, incluso tenemos bocadillos escondidos aquí en alguna parte - Wooyoung sacó una de las cajas y la bajó y vio que había papas fritas y bocadillos apilados dentro. La boca de Haena estaba abierta por la sorpresa. En sus años completos de estar en la compañía,  cómo es que nunca se había dado cuenta de que los dos chicos desaparecían por una gran cantidad de veces?

- Nunca te diste cuenta porque somos tan astutos- dijo Wooyoung como si leyera su mente. Él tiró de ella hacia abajo sobre el colchón con él, envolviendo su cuerpo alrededor del de ella. - Tenemos que dormir ahora - dijo, acariciando su rostro en su cuello. En segundos, los dos estaban roncando levemente y en un país de ensueño pacífico.

- ¡¿A dónde diablos fueron?! - Hongjoong dijo con frustración. Mingi había sorprendido a todos con café. No estaba participando en este regreso, pero quería mostrar su apoyo a todos como pudiera. Les traía comida y café, venía solo a bromear y hacerlos reír unos minutos antes de seguir su camino. Era perfecto para sentarse allí y observar, asegurándose de que todos estuvieran sincronizados.

- ¡Yo los buscare! - dijo Mingi , saliendo rápidamente de la habitación. Después de asegurarse de que nadie lo seguía, fue al armario y abrió la puerta. Reprimió su risa ante la escena frente a él. Estaba seguro de que no habían estado durmiendo mucho, pero parecía que lo habían hecho. El cabello de Wooyoung estaba desordenado y despeinado. Actualmente estaba durmiendo con la boca abierta y las extremidades separadas.

Parte del cabello de Haena  se había caído de su moño y estaba extendido sobre su rostro. Tenía uno de sus brazos y una de sus piernas sobre Wooyoung y roncaba levemente. Mingi pateó suavemente a los dos, haciéndolos saltar.  -¡Estamos despiertos!-  Dijeron al unísono y Mingi soltó una carcajada, acariciando sus cabezas.

- Lindo, Hongjoong-hyung los está buscando a ustedes dos. Deberían irse antes de que envíe a los perros - Los dos se pusieron de pie rápidamente, besando las mejillas de Mingi mientras corrían de regreso a la sala de práctica. Mingi se rio y sacudió la cabeza ante las figuras que se alejaban, apagando la luz y cerrando la puerta detrás de él.

Ahora tres de ellos conocían el lugar secreto y mentalmente se quejaba de cuánto tiempo pasaría antes de que Yunho y Yeosang se enteraran también. Iba a tener que ir a buscar todos los bocadillos y esconderlos en otro lugar. No iba a dejar que Wooyoung también arruinara su comida secreta.