2| 𝐅𝐑𝐈𝐄𝐍𝐃𝐒 ━ teen wolf

28| FROM THE ASHES

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.⃗. 🍂 [ CAPÍTULO
VEINTIOCHO ] 𑁍ࠜೄ ･ﾟˊˎ
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©ᴍᴀᴅᴇʙʏsʜᴀᴡɴᴍɪsᴄʜɪᴇғ

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             ALANNA LE DIO OTRO MORDISCO A LA TORTA DE CHOCOLATE QUE STILES LE HABÍA COMPRADO en el camino. No estaba tan mal como parecía al inicio; más bien, fue una buena cena si consideraba que ella no sabía cocinar tan bien. No era algo nutritivo, pero la sacó de apuros, a decir verdad.

Aun sin haber terminado de masticar, casi se atraganta por lo que acababa de decir Stiles a su lado. El chico al instante le extendió su botella con agua.

—Espera un momento, ¿cómo es que llegamos al punto donde la abuela de Lydia puede ser el Benefactor? —cuestionó la chica una vez que logró pasar la comida.

Ambos estaban en la oficina del sheriff Stilinski, sentados en el mueble largo frente a su escritorio. Alanna había estado en la comisaría desde las cuatro de la tarde. Por otro lado, Stiles recién había llegado hacía unos cinco minutos. Los dos esperaban al sheriff y a Lydia.

—La señora Martin guardó las supuestas cenizas de la abuela de Lydia en un jarrón durante todos estos años —explicó Stiles cuidadosamente—. Ayer iban a esparcirlas en la casa del lago, pero Lydia se dio cuenta que en realidad eran cenizas de serbal.

—Pero la abuela de Lydia está muerta, ¿cómo se supone que ella sea la que esté financiando las muertes?

—Pues..., Lydia y yo llegamos a la conclusión de que sigue viva y que fingió su muerte.

Alanna levantó sus cejas. De haber tenido otro pedazo de chocolate en su boca, se hubiera atragantado de nuevo.

—Bueno, es probable que esté viva —corrigió Stiles. La verdad es que aquella suposición era algo rebuscada; imposible no, difícil de creer, sí.

—No lo sé, Stiles. No me convence.

—Vamos, es una banshee, como el Benefactor. Y antes de que muriera escribió un código en un pedazo de papel —enumeró con sus dedos—. Y tenía esa habitación rara a prueba de ruido en la casa del lago.

—En todo caso, ¿tendría cuántos? ¿Como ochenta años? —lo miró obvia—. No me imagino a una abuelita con problemas de cadera siendo una asesina en serie.

—Eso porque no has conocido al papá de Argent.

Ambos voltearon sus cabezas hacia la ventana detrás suyo al escuchar movimiento en el pasillo de afuera. Volvieron a su posición anterior al darse cuenta que se trataba de Haigh, y no del sheriff o de Lydia. Alanna le extendió el recipiente a Stiles, y después de que ella lo haya visto insistente, comió un poco de la torta.