Capítulo 22'~

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La futura pareja de un gatito y pollito se volvieron a reencontrar a final de su jornada laboral en el Instituto, volviendo a recordar al cita pendiente que tiene ese mismo día más tarde

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La futura pareja de un gatito y pollito se volvieron a reencontrar a final de su jornada laboral en el Instituto, volviendo a recordar al cita pendiente que tiene ese mismo día más tarde.

Jimin mentiría si decia que no estaba emocionado, su Hyung lo invitó a salir a un lugar cuya sorpresa no sabe todavía. Yoongi le dijo que no podía decirle nada hasta que lo viera con sus propios ojitos.

El pelirubio se despidió del mayor pelinegro con una sonrisa y agitando su mano, empezando a caminar las cuadras hasta su edificio.

Mientras un Yoongi muy ansioso y preocupado caminaba al lado opuesto con su mente llena de ideas para la cita de confesión de esa tarde. Estaba que le daba un ataque de ansiedad.

Jimin caminaba con algo de rapidez hasta su departamento, donde abrió la puerta con su llave y la cerró rápidamente, dejó sus cosas descuidadamente en el piso de la sala para ir a su habitación, abrió sus gavetas y closet llenos de ropa. Buscando las prendas ideales para su linda tarde.

Con una sonrisa buscaba varias prendas para combinar y recrear un lindo atuendo, pero tuvo que parar un momento cuando escuchó el sonido de su celular anunciando una llamada entrante.

Dejando el pequeño desastre de ropa que estaba arriba de su cama, salió de la habitación hasta su sala donde había dejado sus cosas cuando entró a este.

Buscó su teléfono en su bolsillo y contestó la llamada sin ver el nombre o número.

— ¿Hola? — Habla Jimin de inmediato.

—...Jimin — Contestó la voz del otro lado de la línea.

En ese momento el pelirubio se tuvo que apoyar contra la pared al reconocer esa voz grave e intimidante, conocía perfectamente esa voz.

Abrió sus ojos con sorpresa sin poderlo creer, apretó fuerte sus labios creando un silencio incómoda en la llamada.

— N-nam...

Decir ese sobre nombre le dió escalofríos de la nada.

— Jimin... Dios, por fin te encontré.

El pelirubio estaba que le daba una crisis de pánico, miraba a todos lados del solitario apartamento con miedo de ser observado.

— ¿C-cómo conseguistes mi número?— Habló nuevamente con su voz entrecortada de los nervios.

— Eso no importa ahora, te encontré, no sabes el alivio que tengo.

— No tenías que hacerlo.

— Oh, claro que tenía que hacerlo— Se escuchó una risa grave a travéz de la línea.— Recuerda que tenemos algo pendiente.

Jimin cerró sus ojos con fuerza aguantando las ganas de llorar de rabia.

— N-no tenemos nada pendiente, Namjoon — Habla Jimin apretando su teléfono.

— Claro que si, pronto nos veremos Kim Jimin, ya es hora de volver a casa— Termina la oración antes de cortar la llamada.

El pelirubio termina de apoyar toda su espalda contra la pared mientras se desliza hasta quedar sentado en el piso y abrazando su teléfono contra su pecho.

Niega con la cabeza, se niega a llorar, no ahora que tiene una tarde hermosa con Yoongi.

— Tranquilo, no permitiré que nada malo pase, ni a ti, ni a Hyung.

Jimin susurra abriendo sus ojos, mirando un punto fijo al techo mientras acariciaba y abrazaba con cariño su redondito vientre.

— Te lo prometo.

Sonrío, secó la primera lágrima que se escapó de sus ojos, se levantó con cuidado y con pasos apresurados volvió a entrar a su habitación.

No dejaría que su estado de ánimo arruine su hermosa cita por esa llamada.

No dejaría que su estado de ánimo arruine su hermosa cita por esa llamada

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𝑷𝒐𝒍𝒍𝒊𝒕𝒐... |𝗬𝗠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora