11.-Hospital.

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Se despidió de un Jean somnoliento y de Levi que lo tenía cargado. Jean tenía los ojos casi cerrados, pero se despedía de todos. Cada cuantos minutos daba un bostezo para acomodarse mejor en el hombro de Levi.

Tenía tanto que pensar.

Lo que decía Hange era real. Él simplemente no podía pensar en estar solo con Levi, también era un compromiso con Jean.

Venían en el mismo paquete.

¿Se podía amar a alguien que no era de tu misma sangre?

Erwin aún tenía dudas.

Él quería a Jean, claramente había sacado una vena paternal que pensaba que no tenía. Pero estar junto a Levi significa que también tenía que ser un padre para Jean. No solo el tío que le daba una dona o solo dar pequeños consejos de modales y mejorar su actitud.

Era un trabajo para siempre, un compromiso único en que no podía romper, porque eso significaba lastimar a Jean y darle una falsa ilusión de otra figura paterna.

Significaba que tendría que estar en la vida del niño, y dar consejos, tener disgustos, como también tener buenas experiencias.

—¿Te noto algo complicado? —su padre le dejó una taza de té verde en la mesita. Ambos estaban en el estudio de su padre, Erwin con la excusa de terminar de leer el libro de que tenía su padre. Y su padre terminando sus investigaciones.

—Sabes que te dije que Levi fue mi pareja—él asintió—... Él recuerda, es solo... Levi tiene un hijo. Y no creo que yo sea suficientemente bueno para ser padre.

Su padre sonrió un segundo con diversión, dio un suspiro.

—Cuando hablamos porque no querías tener hijos con Marie, tu respuesta fue diferente—el dejo su taza en la mesa también—dijiste "No quiero cambiar mi estilo de vida por un niño"

—Si dije eso—Erwin no entendió a su padre.

—Ahora tu respuesta es no ser lo suficientemente bueno para ese niño.

—Es... Diferente conozco a Jean, hay tantas cosas que pensar. Es un niño inteligente, pero no le gusta quedarse quieto. Tendría que poner mucha atención en todo lo que digo y como lo digo. ¿Y qué pasa si lo pierdo algún día? ¿Si se enferma?, ¿Y se llegó muy tarde?... Padre esto no es gracioso.

Su padre movió la cabeza divertido.

—Ay Erwin—él negó—¿Sabes cuál es la diferencia hijo? —Erwin negó—es que tú lo amas. Tus preocupaciones no son de que Jean sea una molestia, son de no poder ser el padre que él necesita. Déjame decirte hijo—su padre sonrió—las preguntas y miedos que estás teniendo son los mismos que tienen los padres cuando sus bebés recién nacidos llegan a este mundo.

—Pero... No soy su padre biológico—titubeó.

—No se necesita esos lazos sanguíneos para amar a las personas. Amas a Levi, si bien no es el mismo tipo de amor, se produjo con el tiempo y dedicación.

—... Y si él no me quiere como su padre—Erwin admitió.

—No puedes forzar ese tipo de amor, dale tiempo. Y sobre todo ustedes dos tienen que hablar, como también tienen que hablar con Jean. Por todos los cambio, no va a hacer fácil para un niño entender ahora que tiene dos papás o su papá va a tener una pareja. Puede haber celos como también rabietas.

Erwin suspiró. Tomo su taza de té pensando en todo lo que se le avecinaba. Ser un padre nunca estuvo en sus planes de comandante, pero realmente no se sentía obligado a sumir ese nuevo rol con Jean, solo...

RecuerdameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora