𝘽𝙇𝘼𝘾𝙆'𝙎 𝙇𝙀𝙂𝘼𝘾𝙔 ||ʜᴀʀʀʏ ᴘᴏᴛᴛᴇʀ²

09|| I BET ON YOU, POTTER

"APUESTO POR TI, POTTER"
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—Me ha enviado esto —dijo Hermione, tendiéndoles la carta.

Harry la cogió. El pergamino estaba húmedo debido a las lagrimas que había soltado la castaña

Querida Hermione:

Hemos perdido. Me permitirán traerlo a Hogwarts, pero van a fijar la fecha del sacrificio.

A Buckbeak le ha gustado Londres.
Nunca olvidaré toda la ayuda que nos has proporcionado.

Podrías por favor decirle a Casiopea Black que le he enviado una carta también, o simplemente enseñarla esta. Gracias

Hagrid

—No pueden hacerlo —dijo Harry incrédulo—. No pueden. Buckbeak no es peligroso.

Casiopea soltó una risa sarcastica

— Seguro que mi tío consiguió atemorizar a la Comisión para que tomaran esta determinación. Además en el ministerio están todos vendidos, con unas cuantas monedas Hagrid hubiera podido ganar el juicio, allí son así de retrógradas.

— Pero seguro podríamos hacer algo —dijo Ron, decidido—. En esta ocasión, incluso colaboraré con la serpiente —señaló a Cassie — y así no tendríais qué hacer vosotras solas todo el trabajo. Yo os ayudaré.

—¡Ron! — Hermione le echó los brazos al cuello y rompió a llorar. Ron, totalmente aterrado, le dio unas palmadas torpes en la cabeza.

—Ron, de verdad, siento muchísimo lo de Scabbers —sollozó en el hombro del pelirrojo.

—Bueno, ya era muy viejo —dijo Ron, aliviado de que ella se hubiera soltado—. Y era algo inútil. Quién sabe, a lo mejor ahora mis padres me compran una lechuza.

— Yo también ayudaré — dijo Harry decidido mirando a Casiopea, pues sus amigos estaban en su propio momento

— No esperaras que me tire a tus brazos como hizo Granger, ¿verdad? — Harry rodó los ojos

— 5 galeones a que estos dos acaban juntos — señaló con la cabeza a la pareja de amigas que seguían abrazados

— Uff a muy largo plazo diría yo, 5 a que se acaban liando por la emoción del momento

— Pues yo digo que se confiesan sus sentimientos

— Hecho — se apretaron las manos mirando de reojo a Ron y a Hermione

(...)

Las vacaciones de Semana Santa no resultaron lo qué se dice relajantes. Casiopea estaba que se subía por las paredes, literalmente caminaba de aún lado a otro intentado memorizar tantos conceptos como le fuera posible en el menor tiempo posible.

Sus amigos estaban de acuerdo de que era la reina del drama, pero en esta ocasión debían callarse, pues si ellos estaban agobiados, Casiopea con el doble de asignaturas lo estaba el doble. Aún ni sabían cómo hacía para asistir a todas sus clases, Aquila seguía creyendo que se duplicaba con algún hechizo que ellos no conocieran, Adam por su parte opinaba que algo ocultaba.

Nadie tenía tanto trabajo como la rubia. Normalmente era la última en abandonar por la noche la sala común y la primera en llegar al día siguiente a la biblioteca. Sorprendentemente era capaz de seguir luciendo el rostro perfecto, sin rastro alguna de ojeras y señal de cansancio.

El trío de oro se había reunido un par de veces con la heredera Black para hablar del caso de Buckbeak. Seguían sin encontrarle solución alguna.

La tensión se podía oler en el aire. La tensión entre Gryffindor y Slytherin que tendría lugar el sábado tras la Semana Santa.
Cuando las vacaciones terminaron, la tensión entre los equipos y entre sus respectivas casas estaba al rojo. En los corredores estallaban pequeñas peleas que culminaron en un desagradable incidente en el que un alumno de cuarto de Gryffindor y otro de sexto de Slytherin terminaron en la enfermería con puerros brotándoles de las orejas.