Capítulo 1

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Un puñetazo salió disparado a la mandíbula de Neil, desequilibrando todo su cuerpo. Trató de ponerse en posición para defenderse, pero antes de que pudiera reaccionar, otro golpe llegó a su rostro, cayó hacia atrás. Su cráneo hace un ruido horrible contra el suelo. Su visión se oscurece. Una patada golpea primero sus costillas y luego su cabeza. ¿Esos sonidos que escucha son sirenas? Antes de que pudiera perder la conciencia, la voz del hombre que lo atacaba le dijo: 

“No confíes en Andrew Minyard”. 

.

Sus ojos se abrieron, la luz artificial lo cegó un instante. Escuchaba personas hablar a su alrededor, pero no tenía fuerzas para tratar de comprender lo que decían. Los cerró de nuevo y su mente quedó en blanco de nuevo.

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Cuando se despertó, no reconoció en qué cama estaba. Su instinto le dijo que huyera, pero el entumecimiento que sentía no lo dejó moverse demasiado. Tampoco podría por la cantidad de cosas que tenía conectadas al cuerpo y en los brazos. Comprendió que se encontraba en un hospital, pero no comprendía por qué se encontraba en ese lugar. Su cabeza dolía. 

Observó el lugar para identificar la salida, la hora del día, la fecha, algo que pudiera calmar su acelerado corazón al no comprender dónde estaba. Al observar su alrededor, vió a un chico rubio durmiendo en una silla cerca de la cama. Tenía las piernas arriba del asiento, apoyaba su codo derecho en la rodilla para sostener su cabeza. La posición no parecía muy cómoda.

Un chico moreno, alto, entró en la habitación con una bolsa de súper en la mano. Los dos se paralizaron mientras se observaban. Mientras que él en la cama era desconfianza. El chico brillaba de emoción.  

-Oh por Dios, Neil…- En un segundo se encontraba a su lado. Los ruidos debieron despertar al rubio porque ya se encontraba al otro lado del catre- ¿Cómo te encuentras?- escuchaba la preocupación en su voz.

-Yo eh… no siento nada.

-¿Qué?

-Morfina, Nicky- respondió el otro. 

Seguía observando a los dos chicos sin comprender lo que pasaba, realmente no conocía a ninguno de ellos, ¿por qué estaban ahí?

-Lo siento, pero…-carraspeó, sentía que no hablaba desde hace días. Su garganta estaba seca- no los conozco, ¿quiénes son?- recordó la conversación de recién- supongo que eres Nicky y tu deber ser… ¿Neil?

Los dos quedaron totalmente inmóviles. El moreno parecía destrozado, mientras que el otro… el otro parecía aburrido, como si estar ahí o en otro lugar fuera exactamente lo mismo. Vió algo en sus ojos, una oscuridad que permaneció unos segundos y luego se desvaneció, quedando su expresión totalmente en blanco. 

El silencio se condensó entre ellos. Movió sus manos incómodo y observó algo en sus brazos que antes no estaban ahí, eran cicatrices y quemaduras circulares. No parecían recientes, ya se encontraban curadas desde algún tiempo. Quiso recordar cuándo las obtuvo y su mente se quedó en blanco. Trató de recordar qué estaba haciendo antes de despertar en el hospital, pero un dolor en la cabeza casi lo derriba. De repente, empezó a sentir que su respiración se volvía irregular, trató de mantener la calma frente a los dos desconocidos. Trató de pensar, ¿cuál era su nombre en ese momento? ¿Qué identidad tenía? No podía recordarlo. Casi no podía respirar bien.

-¿Cómo me llamo?- susurró.

La brusca inhalación de Nicky lo hizo mirar hacia arriba, pero no lo estaba mirando a él, sino al chico de al lado. Nicky volvió a enfocar su mirada en él y temblando dijo:

-Eres Neil.

-No, él es Neil.

-Él es Andrew. 

Un dolor agudo atravesó su cabeza, la sostuvo con sus manos y su cuerpo se fue hacia adelante. Unas fuertes manos lo estabilizaron y lo acomodaron hacia atrás, para que pudiera recostarse. Miró hacia arriba era el tal Andr…

“No confíes en Andrew Minyard”. 

Con un rápido manotazo se quitó las manos del chico de encima, este se fue hacia atrás como si lo hubieran empujado, casi se podía ver en su rostro indiferente la sorpresa por su reacción. 

-No me toques- su voz sonó ronca por la falta de uso y enojada. Entrecerró los ojos hacia él. Cuando vió que el chico no se estaba acercando, miró a Nicky nuevamente. 

-Neil…-susurró sin creer lo que sus ojos estaban viendo- no pensamos que… los médicos nos dijeron que no íbamos a saber los resultados de tus lesiones hasta que despertaras y creo que…

Su mirada se fue de nuevo hacia Andrew, debía vigilarlo por si volvía a acercarse a la cama. Se encontraba apoyado en la pared. Su mirada seguía inexpresiva, pero sus hombros estaban tensos y sus manos en puños frente a él, donde tenía los brazos cruzados en su pecho. No quería dejar de vigilarlo, pero las palabras de Nicky dirigieron su atención nuevamente hacia él.

-Parece que perdiste la memoria.

Instante - AndreilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora