Señas de amor

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No tenía a donde ir. Pensé en regresar con mis padres, pero todo sería difícil, mi madre estaba preocupada por mi, quería que formará una familia y que tuviera un hogar ,ahora con toda esta situación muy seguramente me haría disculparme y pedir continuar con aquella "relación". Así que definitivamente no era una opción.

Mi hermano, bueno sería más fácil con él pero sabiendo que vive fuera del país y que para colmo este viviendo el los apartamentos de su facultad lo volvía complicado, así que tampoco era una opción.

Así que me quedé sin ningún lugar al cual pueda refugiarme. Por ahora solo dormiría en un hotel, mañana regresaría al trabajo y después decidiría a donde ir.

A la mañana siguiente me arregle y tome todo lo necesario para trabajar, tome la misma ruta puesto a que el hotel no quedaba tan lejos de mi antiguo departamento y espere, deseé que este día fuera mejor que el anterior.

Claramente aún tenía cosas por arreglar.

Al llegar a la puerta del edificio donde laburaba, encontré a las dos personas que una noche anterior les pedí que no me volvieran a hablar,solté un suspiro tan pesado que parecía ser ese el último de mi vida.

Trate de esquivarlos pero fue en vano—Les dije que me dejarán en paz.

—Lo lamento si...la situación se me fue de las manos, solo fue una aventura,nada más, no quiero casarme ni tener nada serio con ella.

Pude notar la desilusión en su rostro,estaba segura de que él me diría que se amaban y que lamentaban que las cosas se dieran así pero termino viendo con que clase de hombre se envolvió. Ahí estaba su cucharada de Karma.

—Eres un idiota —Jenni lo soltó sin importar le si los demás escuchaban—No me arrepiento, nunca lo hice y si, me encantó hacerlo a pesar de ser tu amiga pero es culpa tuya...sabes que todas mis relaciones se dieron por estás misma situaciones, el amor me encanta pero ese deseo y adrenalina que causa el hacerlo a escondidas me excita...no planeo disculparme.

—Nunca te pedí una disculpa, a ninguno de los dos...no las quiero, y  sabes, hablando así solo dejas que el mundo vea que clase de mujer eres...y sobre tus relaciones, si estaba consciente de ello, pero no me importo pues creí que el lazo de nuestra amistad sería más fuerte, claramente estaba equivocada pero yo tampoco me arrepiento, porque me enseñó que soy muy valiosa como para dejar que dos imbéciles me quiten mi felicidad. No me importa que sea de sus vidas, no me importa si terminan juntos o deciden separarse, así que déjenme en paz,olviden me así como yo lo haré con ustedes.

Era duro, es más que obvio que lo era.

Una amistad de largos años rota por un amorío. Un amor manchados y asesinado por caer en la tentación.

Era una mancha andante que buscaba encontrar su color, quería alejarme de toda esa situación,de toda la basura y los malos caminos. Irme de la cuidad empezaba a sonar tentador y no lo haría por ellos, ya estaba cansada del ruido que siempre había.