Guardare mi libertad-Freenbecky

Capitulo 17

 

Han pasado tres eternos días….tres días duros durísimos. Finalmente Rebecca no me llamó ni yo lo hice, después de todo lo que pasó en su coche, de todo lo que me dijo creo que Rebecca necesita tiempo…que idiota soy… quizás ella piensa lo contrario, quizás piensa que la que necesita el tiempo soy yo, que soy yo la que tengo que aclarar las ideas, la que tiene que tomar una decisión…no lo sé….no sé que pensar la verdad.

El caso es que después de tres días infernales con comeduras de olla incluida ya es jueves y tengo vuelo hacia Los Ángeles para mañana viernes regresar de nuevo a Chicago. Me encuentro a solas en el vestuario de la compañía, con mi taquilla abierta, acabando de prepararme cómo hago siempre y algo me confunde, una voz que reconozco pero qué no me nombra cómo suele hacerlo.

-Buenos días Asavarid –Se oye sin muchas ganas.

¿Noey? ¿Qué diablos hace ella aquí? Pienso nada más verla y colocarse a mí lado para abrir su taquilla.

-¿Qué haces tú aquí? He mirado el cuadro y no estabas en la ruta –Le digo sin decirle ni buenos días ni por ahí te pudras.

-¡Qué pasa! ¿No te gusta que vuele contigo Asavarid? –Me responde con cierta ironía y sin mirarme a la cara, está totalmente sumergida en su taquilla

-¡No es eso! Es sólo que no te esperaba –Le respondo un poco cortante.

-Bueno verás Asavarid …pues es que me he cambiado el vuelo con Kate…a no espera! Qué Kate no trabaja con nosotras….Lo he hecho con Mary…. ¡Ah no que tampoco! Ha sido con Alice…¿O quizás con Helen? –Actúa haciéndose la despistada.

Veo claramente por dónde va, está molesta porque no la llamé, está enojada cómo una mona porque la he estado evitando, pero no pienso dejar que me toree, que me amargue el viaje o que me dé lecciones de lo que sea, lo tengo clarísimo. Es mi vida privada y punto.

-¡Vale Noey! ¡Déjalo quieres! –Le respondo acompañado con un gran portazo de taquilla mientras camino hacia el espejo para terminar deretocarme.

-¿Qué te pasa Asavarid no te gusta lo que oyes? –Me dice nada más le doy la espalda.

Yo me giro ya bastante enojada, ya estoy harta y además ¿Por qué demonios me llama Asavarid?,

-¿Por qué carajo me llamas Asavarid Noey? –Le pregunto encarada a la pelinegra, la tengo a dos centímetros de mi cara, es que no la entiendo.

Veo que sonríe, la jodía esperaba esa pregunta.

-Para que no te olvides de quién eres Freen–Me contesta rotundamente y sin ningún temor a mi mirada.

Por un momento me ha dejado sin contestación pero soy bastante rápida de mente.

-Yo no me olvido de quién soy Noey ¿Te queda claro? –Le respondo entre dientes.

Pero si yo soy rápida Noey es el doble de rápida.

-¿Ah no Freen? ¿No te olvidas? ¡Pues yo creo que sí! Yo creo que te has olvidado de que estás casada! Te has olvidado completamente de lo que ese compromiso significa! El boca chancla no es santo de mi devoción pero lo que estás haciendo con él no está bien! –Me recrimina.

-¡Qué no le llames boca chancla Freen! ¡Qué lo respetes carajo! –Le grito fuera de mis casillas.

Noey no da crédito a lo que oye, creo que en el fondo yo tampoco. Abre la boca impactada por mis palabras, abre los ojos como platos.

-¿Pero tú te oyes Freen? –Me pregunta estupefacta señalándome con sus manos –¡Alucino contigo mujer! ¿Qué yo lo respete? Eres tú Freen que no le respetas! Madre mía si Heng tiene unos cuernos que no entraría ni por el Arco del Triunfo! ¿Es que no te arrepientes de nada? ¡Te estás follando a otra persona Freen! ¡Esa Rebecca te ha absorbido los sesos o lo que sea que te esté absorbiendo! –Me grita sin contemplaciones.