Capítulo 03

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—A mí me parece una buena idea la propuesta de los Park, YoonGi hyung.—Dijo Hoseok mientras comía de su ramen instantáneo, YoonGi suspiró frustrado aún sin saber qué decir.—No lo sé, con su ayuda tienes más posibilidades de tener un mejor futuro.  

—Solo estoy recibiendo su lástima. Como no pudieron adoptarme cuando era niño de algún modo quieren ayudarme como no lograron hacerlo hace años.—Chasqueó sus dientes, mientras le daba vueltas al ramen sin intenciones de comerlo, no tenía hambre.—Es más, no quiero que JiMin se sienta aún peor teniéndome cerca porque sé que solo soy un estorbo para él y su nueva vida de niñito rico.

—No lo veas de esa forma, míralo en que todo esto puede significar un cambio en ti. No me digas que prefieres estar toda tu vida cortando el césped y ser sirviente.—Rodó los ojos y sus palabras sonaron casi como un regaño.—Por Dios YoonGi hyung, mereces ser feliz también.

YoonGi se quedó callado sin saber que responder.

—Hyung, sé que no llevamos conociéndonos mucho tiempo pero durante todo este tiempo siendo amigos quiero que sepas que me preocupo por ti, no te ves bien.—Dijo, refiriéndose a que había bajado un poco más de peso desde que se conocían.—, tienes que comer más y no podrás hacerlo si no tienes el dinero suficiente.

—...

—Vas a ver que con el tiempo ese chico del que tanto me hablas va a querer arreglar las cosas.—Sonrió, tratando de darle ánimos.—Solo tienes que darle tiempo.

—Voy a pensar mejor la propuesta de los padres de JiMin.—Aseguró sin apartar la vista de su ramen que ya se había enfriado mientras seguía dándole vueltas sin intenciones de comérselo.—, quizás tengas razón.

—¿Y sí salimos por ahí? Vamos, no puedes echarte a morir por toda esta situación. Eres nuevo en la ciudad ¡Mereces conocer cosas nuevas!—Le animó y se paró frente a él, sin embargo, la poca respuesta por parte de YoonGi lo hizo borrar su sonrisa.—Hyung, anda...

—No Hoseok, yo... solo quiero estar solo.—Pidió sin verlo.—, creo que no me siento bien quizás en otra ocasión te tome la palabra.

El menor asintió y después de dejar el tazón vacío en el lavaplatos abandonó el pequeño apartamento sin decir nada más. YoonGi se quedó solo y finalmente se permitió llorar, no llevaba menos de dos meses allí y ya quería regresarse a donde él pertenecía.

Él no era un chico de ciudad, jamás lo sería.

~*~

—Han pasado dos días desde que llegaste y apenas decidiste bajar para acompañarnos a cenar.—Dijo el señor Park con voz fuerte, evidentemente en desacuerdo con la actitud del pelirubio.—, me parece muy desconsiderado de tu parte.

JiMin se quedó callado mientras raspaba sin interés el pedazo de bistec, sinceramente, estaba allí sentado por compromiso.

—Cariño...—Llamó la señora Park con voz dulce, aligerando un poco el tenso ambiente.—, la razón por la que queríamos cenar contigo es porque tenemos algo importante que decirte.

—Ajá.—Murmuró dándole a entender que tenía su atención sin embargo aún no hacía contacto visual.

—Queremos ayudar a YoonGi para que pueda tener una carrera universitaria y sí acepta estudiará en tu misma universidad.—Terminó por decir el mayor de la sala. JiMin dejó caer el tenedor a un lado de su plato y abrió los ojos como platos, riéndose incrédulamente.

Jardín de Rosas - YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora