Podría perderme entre letras, pero a la final no le hallaría sentido a ninguna, entonces lo plasmo en el papel; plasmo los susurros de un poeta en páginas que las personas lean, así ellos consiguen orden al caos de mi cabeza.
Esto es un poemario, n...
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Harta de escuchar voces que me molestan, cansada de estar rodeada de personas que me representan, fatigada de rogar por gente que no merece la pena.
Quiero silencio para poder escuchar mi propio incendio, soledad para enfrentar mis miedos y claridad para entender lo que quiero.
Quisiera arrancarme el corazón y no volver a sentir de nuevo, quisiera apagar mi cabeza y no escuchar mis penas, quedarme en calma y a solas con mis poemas, escribiendo sobre días de guerra, retratando los escombros y lo que queda de lo que era.
Necesito silencio, me ahogo y caigo dentro de un arroyo que me consume de a poco, congelando mis huesos, llenándome de miedo.
La soledad me va a ayudar a sanar las heridas impuestas cubiertas de tristeza, sin manos que tomen mi dolor y lo lancen lejos de este corazón, solo el viento y el tiempo me pondrán de pie de nuevo.
Me queda avanzar, con la seguridad de que mi alma, heridas y fuerzas me van a ayudar, no tú ni nadie más; transformaré todo este dolor en el valle que nunca verás, en el que solo yo, seré digna de admirar para llorar.
