○ ✬『 Cɑpítʋlσ 𝟼 』 ✬ ○

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Ryeo Wook apretó los dedos alrededor de la base gruesa de su pene y bombeó arriba y hacia abajo. Se balanceaba hacia arriba sobre sus rodillas para darse una mejor posición. Ye Sung le tocó el rostro, deslizando sus dedos en las orejas y la parte posterior de la cabeza en ansiosa desesperación.

Sus movimientos se hicieron más erráticos, y su polla tiró y pulsó en su mano. El primer chorro caliente salpicó en su lengua rápidamente seguido por otro y luego otro. Golpeó la parte trasera de su garganta, algunos chorreaban hacia adelante en su lengua luego corriendo sobre sus labios, y algunos bajando cuando los tragó.

Sus movimientos se hicieron más suaves, y Ryeo Wook lamió la corona cuando la última erupción entró en su boca. Casi antes de que Ye Sung pudiera apartarse, Kyu Hyun se movió, con movimientos urgentes. Estaba duro y tenso, y Ryeo Wook sabía que ya estaba cerca del orgasmo.

Wook lo miró fijamente, sabiendo que estaba enormemente excitado al ver a otro hombre joder su boca, viendo la evidencia en sus labios y lengua. Recordó que dejó que los restos de la eyaculación de Ye Sung se chorrearan en las comisuras de su labios entonces se lamió la boca para limpiarlos.

—Dios— murmuró Kyu Hyun.

Le agarró la mandíbula y la mantuvo firme cuando él, con impaciencia, empujó en su boca. No había ninguna delicadeza a sus movimientos, sino más bien la urgencia fuerte de un hombre presionado más allá de su límite.

Se agachó, agarrándose de los brazos de Ryeo Wook con sus manos y lo tiró hacia atrás hasta que su cabeza se apoyó contra la pared de la ducha. Ambas manos enmarcando su rostro, lo posicionó y entonces penetró profundo.

El agua se detuvo, y Ryeo Wook débilmente se percató que Ye Sung la había cortado. Pero él no se había ido, lo cual le sorprendió. Kyu Hyun era mucho más voyeur que Ye Sung. Una mamada no describía adecuadamente lo que estaba haciendo. Pero entonces Wook no estaba haciendo nada. Kyu Hyun estaba follando su boca tan fuerte y tan despiadadamente como follaba su culo. Movimientos largos y profundos, llenándolo hasta que le robaba el aliento.

Sus dedos se hundieron en su cabeza, a través de su cabello, y su respiración agitada se hizo eco en las paredes de mármol. No hubo ninguna advertencia, ninguna desaceleración para su liberación. Él estalló en su boca. Fluido caliente salpicó en su lengua, y se vio obligado a tragarse todo lo que bombeaba más fuerte y rápido.

El gemido agónico de Kyu Hyun llenó sus oídos así como le llenó la boca. A continuación, sus golpes se hicieron más lentos y más suaves. Sus manos se relajaron contra su cabeza, y con un estremecimiento, finalmente se apartó.

Dos pares de manos llegaron por él, ahuecándole los codos y ayudándolo a levantarse. Se tambaleó entre ellos, vacilando a poner un pie delante del otro.

—Tranquilo, amor— Ye Sung lo aliviaba cuando lo ayudó a salir de la ducha.

Ryeo Wook se estremeció, y Kyu Hyun rápidamente la arropó con una toalla a su alrededor. Se aferró a los extremos mientras los dos hombres se secaron con toques rápidos de sus toallas. Luego volvieron su atención de nuevo sobre él. Atrapado entre ellos, suspiró de alegría cuando Kyu Hyun le secó el pelo y Ye Sung lo recorrió con otra toalla por su cuerpo, absorbiendo cada gota de agua de su piel.

Se aventuró cerca de su agujero y él tembló. En el borde. Agudo y deseando. Era la única manera de describir la tensión arremolinándose por sus venas. Tenía que correrse. Lo quería demasiado.

—Vamos a tomar turnos follándote, Nene— le susurró con voz sedosa Kyu Hyun en su oído. —Largo y duro hasta que ruegues por misericordia.

Sus rodillas se doblaron, y tuvo que agarrarse de los hombros de Ye Sung para mantener el equilibrio. Ye Sung le tomó la muñeca y tiró de Ryeo Wook hasta que cayó contra él. Envolvió sus brazos alrededor, la alzó hasta que estuvo al nivel de los ojos con él y lo besó fuerte y largo. Sin apartar la boca de Wook, lo llevó al dormitorio, con las piernas de Ryeo Wook colgando y chocando contra las suyas.

La tercera rueda se revelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora