! ׅ࣪ my bf is a pornstar ׅ ࣪ nomin ✶ ~ ࣪ ׅ

Ꮺ ָ࣪ capítulo 14 | photo machine 𓂃

Solía pensar que ver televisión, que convenientemente tenía puesto una película que te deprimía, mientras comías helado; era cosas de fantasías.   

Y aunque estaba en su cuarto, con la luna de única fuente de luz, el helado era lo poco que mantenía sus lágrimas donde debían estar.   

Jaemin nunca se sintió tan impotente.   

Estaba triste por Beomgyu; él vio el brillo en sus ojos los primeros días, y ahora todo desapareció tan rápido.   

La industria del entretenimiento no era nada fácil, pero las caídas que daba no parecían ayudar mucho.   

Honestamente, estar sin trabajo era lo que menos le importaba ahora; porque estaba tan bien, que faltaban minutos para llamar a Jeno y decirle que venga.   

Pero son simples las maneras en las que uno pierde la confianza y se hunde. Así es como, las formas de volver a ser feliz se vuelven más difíciles. Es muy injusto.

Seguía con ganas de llamar a Jeno, pero ¿estaba preparado?   

No quería verlo llorar otra vez, no soportaba el hecho de que sea por su culpa.   

Muchas veces dijo que odiaba la palabra esperar. De hecho, se lo dijo a Jeno el día que decidieron ser novios.

Pero se ve que, si no esperaba, no haría más que seguir haciéndole daño.   

!  ׅ࣪  my bf is a pornstar ׅ ࣪ nomin ✶  ~  ࣪ ׅ

–Estoy bien, mamá. – Dijo por enésima vez. –Es obvio que estaré triste, pero es algo que siempre pasa, ¿o no?   

–Claro, hijo. – Decía por la otra línea. –Sólo que en serio creo que alguien les embrujó o algo.

–No puede ser. – Murmuró. –Mamá, nadie nos embrujó.   

–¿Ah no? Entonces es pura casualidad que los padres de Jeno se divorcien, deje su trabajo de años, a ti te despiden, a tu amigo no le dejan debutar, Jeongin tiene su cuarto arreglado.

–¿Que los padres de Jeno qué?   

–Jaemin, tienes que cuidart-   

–Mamá, ¿que los padres de Jeno qué?   

–...Pensé que lo sabías.   

Bajó su teléfono, y suspiró.    

Intentó mantenerse calmado por unos segundos, luego volvió.   

–Gracias por llamar, mamá.   

–¿...Estás bien, hijo?   

–Sí. Adiós, te amo. – Cortó.   

Bueno, eso de que las cosas no pueden estar peor, se volvió en la mentira más grande que nunca escuchó.