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☆☆

Zhang sentía un calor inundando todo su ser y eso lo tenía fastidiado. Primero el incidente con el consejero ese, luego el que todos miraran deseosos a su esposo y tercero que hablaran de él y su falta de mano dura para "educar" a JunMyeon y hacerle saber que ya no era un doncel soltero, estaba casado y debía de atender a su marido. Verlo reír a carcajadas con desconocidos lo descolocó y no es que tuviera problemas con controlar sus emociones, claro que no, pero el hecho de saber que alguien más lo podía hacer feliz tan fácilmente le fastidiaba. Ya que, cuando JunMyeon estaba a su lado rara vez se reía tan estruendosamente, siempre tenía la cara relajada y los labios curvados en una dulce sonrisa.

Regresó a la fiesta con una sonrisa neutral pero su sonrisa se borró al ver a Mew acercándosele.

—No me pareció muy educado de su parte el comentario de hace rato, rey Zhang — le dijo con un tono de voz que fastidió a Yixing

—No te acerques a él, es mío

—Tsk no lo creo, sabe… antes de que se casara con usted fue mío y estoy dispuesto a todo por recuperarlo

—Eso es mentira

—¿Por qué está tan seguro de eso?

—Sus padres jamás me mencionaron un matrimonio previo — Yixing empezaba a actuar a la defensiva, su malestar solo aumentaba con cada palabra que salía de la boca de Mew

Éste tomó un sorbo a su bebida y rió suavemente —Por supuesto que nunca se lo iban a decir pero se lo digo yo, cuando él tenía diez años lo comprometieron conmigo, lo ví y me enamoré pero tenía que esperar a que fuera mayor para poder tenerlo. En el transcurso llegaron más ofertas, mujeres bellas, hombres fuertes y de buen corazón. Chanyeol y Sehun eran los mejores partidos, pero claro, tuvo que llegar el gran y despiadado Zhang Yixing a estropearlo todo

Yixing sintió un frío que le recorrió de la punta de los pies hasta el último de sus cabellos. Por un momento odió a los padres de JunMyeon por no comentarle nada al respecto y aunque no lo quería admitir sentía celos, demasiados celos y el solo pensar en alguien más besando los suaves labios que en la noche de bodas tocaron los suyos, lo hizo quebrar su copa, derramando el líquido en su mano. Se había acostumbrado a que JunMyeon tuviera ojos solo para él, a tener toda su atención y ahora, el ver que alguien más la tenía, lo enfureció.

—JunMyeon está enamorado de mí, intenta quitarmelo y verás como todo será en vano, puedo tratarlo como sea y aún así seguiría a mi lado— dijo el rey con una sonrisa altanera

Ambos estaban frente a frente, Yixing quería quitarle la sonrisa de la cara a golpes y Mew solamente lo miraba divertido porque era más que evidente su fastidio.

—¿En serio? — sonrió — todos tenemos un límite, majestad, y cuando cometa un error, JunMyeon se irá de sus manos —. — Yo que usted lo cuidaba bien ya que como ha visto— señaló a algunos presentes que antes habían visto mucho a su esposo —un día de estos Jun puede desaparecer. Yo fuí capaz de renunciar a mi título por él, quién sabe qué harán los demás con tal de tenerlo —. —Ah y alteza — al pasar al lado del rey, Mew tomó su hombro y en un diminuto susurró le dijo —Sus labios saben tan bien y su piel es tan suave —

Yixing tratando de comportarse, sin que nadie lo viera, le dió un puñetazo firme y rápido en las costillas, haciéndolo jadear del dolor.

El resto de la noche no volvió a ver a su esposo, solo vió a Minho y al esposo del consejero Boun, correr como locos hacía la cocina.
Se reunió con los consejeros para tratar el asunto de su hospedaje, habló de negocios y demás cosas importantes hasta que se dió cuenta de que ya eran pasadas de las once de la noche, así que decidió regresar a su habitación.

Al entrar a ésta vió un bulto ahí, por un momento estuvo a nada de llamar a los guardias pero cayó en cuenta de que sólo se trataba de su durmiente esposo. Cansado de la fiesta se deshizo de su traje elegante para ponerse su pijama azul que a la vez hacía juego con la JunMyeon. Al momento de estar dentro de las sábanas se dió cuenta de que el contrario tenía pequeños espasmos lo cual lo hizo preguntarse si tenía frío o le dolía algo.

Sin tomarle importancia arropó a JunMyeon y a sí mismo y dejó que el cansancio se lo llevara, pero todavía había una pequeña preocupación rondando por su cabeza y por primera vez quiso encerrar a su esposo en una caja y tenerlo para él nada más.

Unas horas más tarde, JunMyeon despertó de un salto, su frente estaba perlada de sudor y sus manos se aferraban a una suave almohada, la cual soltó un ruido lastimero cuando apretó de más.

—¿Qué pasa? — la voz ronca de Yixing lo puso en alerta y soltó de manera brusca su brazo

Enfocó su vista y trató de tomarlo del brazo pero JunMyeon solamente soltó un quejido y se alejó de su agarre.

—Oye, ¿Qué pasó? ¿Por qué estás temblando? — Yixing volvió a preguntar aún más nervioso

—¿M-me abrazas? — fue solo un susurro pero el alto lo escucho y sólo se acostó y abrió sus brazos para que el doncel se acostara en ellos

Yixing no sabía que había pasado, parecía un ataque de nervios o algo así, se quedó despierto otro rato tratando de calmar a la persona en sus brazos ya que en ocasiones JunMyeon pataleaba o sollozaba. No sabía qué hacer así que empezó a darle pequeñas palmadas en la espalda mientras tarareaba una canción que su madre le cantaba cuando era pequeño, esto pareció calmar al menor porque poco a poco sentía que la respiración comenzaba a ser menos acelerada.











☆☆☆☆☆

●u●

Pido perdón por desaparecer jeje, estoy tratando de mejorar algunas cosas de la historia para que sea más interesante para ustedes :3

¿Qué les pareció? •-•

Les pido paciencia con este Yixing jeje, a veces hasta a mi me desespera 🤌🏻

Los leo luego.
Luhandemandaslocas se despide ♡♡

Beloved [LayHo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora