Y si descubrieras que el amor de tu vida te ha secuestrado en todos los tiempos y espacios, para obligarte a recordar, si descubrieras que te has enamorado del tipo incorrecto en esta vida, que el gran secreto que guarda la perla es sobre a quien le...
—A penas me conoces —Dijo Shesshomaru retirando mi mano de su kimono —No seas tan altanera
No respondí, era cierto, porque en tan pocas semanas, a lo mucho habían pasado unos meses y habíamos teñido encuentros muy contados, entonces porque mi corazón se sentía completo si estaba cerca de él
—Shesshomaru, Shesshomaru sama!!! —La voz de su ayudante el tal jacken se escuchaba alarmada y corría a toda prisa hacia nosotros —Es naraku, esta atacando la entrada del palacio en el área Norte, está buscando y quiere su atención
—Pues ya la tiene —Respondió caminando hacia la salida de esa habitación apartada
Se propuso a salir, pero me tome de su abrigo que lo cubría Para poder acompañarlo —Esto será peligro, no es como lo anterior y deberías quedarte
—Pero quiero estar contigo, en cualquier situación y en todo momento, Escucha yo! Tampoco se la razón!!! Pero mi cuerpo y corazón quiere estar contigo también
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—Es como cuando busco a mi mascota, cuando busco a buyo y estoy triste se que él está ahí para mi, de alguna forma cuando me siento sola, o que no hay un lugar a donde pertenecer, mi corazón me pide estar a tu lado
—Insolente! Comparas al amo bonito con una mascota
—Con un gato para ser específicos —Interrumpió Shesshomaru
Mis ojos se abrieron, ¿cómo sabía que buyo era un gato?
—Shesshomaru sama! Debe apresurarse oh Naraku podría destruir el Norte del palacio! —Gritó Jacken y solo logró que Shesshomaru lo viera de manera espeluznante
Shesshomaru se marcó dejándome atrás, grite que me llevara pero no lo hizo —Es mejor así —Dijo jacken —Es por tu bien humana, no lo entiendes ahora pero —Antes que terminara de hablar lo tome por lo que parecía ser su mano para escondernos dentro del cuarto solitario al que shesshomaru me había llevado
El protesto pero tuve que advertirle que sentía unos fragmentos de la perla que se acercaban, y lo peor era que estaban infectados por una presencia oscura.
Unos pasos sigilosos se acercaron haciendo la madera rechinar, Jacken murmuro diciendo que el olor era el de Naraku, así que tome valor y entre mis manos enlace una flecha para prepararme —No podrás contra él —Advirtió el sirviente de Naraku consiguiendo que solo me enfadara
—No me subestimes —Le dije y salí del pasillo, solté la flecha pero solo logre herirle el hombro derecho
corri de prisa lejos de él mientras preparaba la siguiente flecha, esta vez no podía fallar.
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