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En este crucial momento Hyebin solo puede ver como las chicas arrojan la ropa que se encuentra en el closet al no encontrar nada de su agrado. La ropa vuela por toda la habitación como si de hojas estas fueran hechas mientras deseaba que no se rompiera una sola prenda ya que no suele comprar muy seguido pues su gusto es simple, no tan elegante como muchas otras jóvenes usan, pero tampoco es que entra a una tienda y compra lo primero que ve.

Oigan chicas.. ─sus palabras se ven detenidas por el impacto de una remera siendo lanzada a su rostro.

Nadie se dio cuenta, solo ella que se la quitó de encima. Se permitió suspirar y dejarse caer en el suelo, pues hasta su suave cama estaba invadida por toda la ropa que las chicas arrojaban.

Pasaron minutos que para ella se sintieron como horas, al parecer nada dentro de ese closet las convencían. Eso le molestaba un poco a Hyebin, pues está bien que su gusto no sea como el de ellas, pero aún asi tenía algunas prendas para estas ocasiones.

No es una fiesta de graduación chicas, solo es una simple reunión. ─se queja aún tirada en el frio suelo de su habitación.

Pero debes ir con la misión de darles... ─la mayor de todas da media vuelta con su cuerpo para defender lo que decía, pero se detuvo al no encontrarla, hasta que su mirada bajó al suelo y las encontró ─ una buena primera impresión.

Ven aquí.

La sujetan de los hombros y la sientan en la silla.

Todas ellas se toman el tiempo de maquillarla, sin importarles que Hyebin se niegue a ir con su rostro lleno de productos que nunca en su vida ha utilizado tanto como ellas lo hacen. Se excusan que con un poquito de color en su bello rostro angelical no intimidará a nadie con su seria mirada que suele tener a veces que podría asustarlos.

Espero que sean tan amables de guardarlo todo de nuevo.─ como no pude hacer nada más que seguir lo que las chicas decidan, les pide que no se olviden de guardar todo tal y como lo encontraron.

Lo prometemos. ─siendo sincronizadas todas ellas levantan sus brazos con la palma abierta, como si estuvieran en un juzgado.

Cuando vuelvas tendrás todo ordenado como antes. ─ Yeji le asegura, sabe que si ella se lo dice Hyebin podrá estar tranquila de que las menores harán lo que la mayor les ordene.

¿Por qué maquillarme cuando no lo hago en mi vida cotidiana? 

Te verás mas animada. Sabemos lo que te decimos Hye.

─ Confía en nosotras ─Ryujin interfiere en las quejas de su prima.

Te verás genial. ─ Lia pasó detrás de ella en busca de algo y no desaprovechó la oportunidad de tranquilizar a la menor.

No entiendo como puedo dejar hacerme esto. ─ murmuró para sus adentros.

Porque nos quieres~ ─aún así fue audible para Ryujin que tomo las mejillas de la menor entre sus manos y las apretujo, solo para molestarla.

 ¡Ay por favor! ─se soltó de su agarre─ Solo, terminen lo más rápido que puedan.

Serás la chica más hermosa en toda la ciudad. ─le afirmo la mayor antes irse corriendo de su vista y recibir un golpe de la menor.






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Llegó al lugar que Bangchan la citó luego de un largo viaje en autobús.

 Un lugar que nunca había visitado en sus años de vida. Es una hermosa cafetería; sus paredes están divididas por la mitad en dos colores, en la parte de arriba tiene un color verde agua pastel y por la mitad de abajo un blanco viejo; detrás del mostrador donde se hacen los pedidos tiene el nombre del lugar en forma de luces blancas con un fondo rosado; las mesas son simples de blanco, redondas, sillas y algunos sillones de un tono marrón claro, también hay unos cuadros de arte que sin duda alguna buscaría el momento en poder verlos de cerca. Todo parece sacado de una imagen de internet. 

Todo eso lo pudo ver desde afuera del local, porque no se atrevía a entrar. No aún.

Buscó su celular en el bolsillo de su pantalón y mandó un mensaje para avisarle que ya se encontraba fuera de el.


Hyebin
Creo que ya estoy en el lugar.

A los pocos segundos le contestó diciéndole que lo esperará en la entrada y que él iría por ella para que le sea menos incómodo. Lo agradeció muchísimo, porque si fuera por ella estaría dando media vuelta y volvería a su casa arrepintiéndose por aceptar su invitación.

Llegaste a tiempo 

Finalmente hace presencia el chico mostrándose un poco agitado, pero ella no quería pensar en que se apresuró en llegar hacia donde ella se encontraba.

¿Estás seguro que nadie va a secuestrarme? ─ es lo primero que se le ocurre decirle, pues a causa de sus nervios su mente estaba totalmente bloqueada y no podía pensar las cosas antes de decirlas aunque quisiera. 

No te preocupes, hay una chica entre todos ellos. ─con un ademán de manos la invita a pasar dentro de la cafetería. 

Diablos, también van a secuestrarla. ─bromeo para que sus nervios fueran menos obvios de lo que ya estaba demostrando.

Ya sé con quién te llevarás mejor. ─ríe con sutileza para que la chica no lo oyera.

Con el celular en su mano ejerciendo fuerza que tal vez pueda romperlo siguió los pasos de Chan. Aunque pareciera mentira no le importaba las miradas de las demás personas que se encontraban en el local disfrutando de sus bebidas. Le importaba mucho más las personas que él estaba por presentarle en no menos de diez segundos, si resultan ser mayor incluso que él para ella le sería difícil poder socializar. Caminando detrás de él parecía una niña pequeña, de esa manera buscaba que no pudieran verla antes que ella.
Supo que habían llegado a la mesa donde todos se encontraban en el segundo en que Chan detuvo sus pasos, si no fuera porque tuviera reflejos hubiera chocado con la espalda de él.

¿Regresaste solo? ─ una voz profunda y muy varonil pregunta.

Bangchan mire a todos confundidos hasta que gira su cuerpo y se da cuenta del porqué le preguntó aquello. Sonriendo a Hyebin le sujeta con delicadeza el brazo y se mueve un poco de su lado, al sujetarla evita que ella hiciera lo mismo.

Ella es Hyebin ─les presenta alternando su mirada entre ellos y ella. 

Repente el menor de ellos se levantó con rapidez tirando consigo la silla donde antes estaba sentado, asustando a los demás por su repentino y brusco movimiento.

No es posible.. ─llevo las manos a la boca y decidió que debía acercarse para saber que sus ojos no necesitaban anteojos o algo más. ─  Eres tú~ ─de su boca salió una no tan alta carcajada, para la suerte de los demás pues ya tenían la atención de muchas personas, mientras ella solo se mantenía de pie.

Ellos no paraban de mirarlo a él y luego a ella. Tratando de averiguar que era lo que estaba sucediendo. Bangchan seguía de pie tratando de descifrar la expresión de la chica.

Esto se puso raro. ─susurró uno de ellos a otro chico que tenía a su lado.

Mientras que Hyebin retrocedía a la vez que Jeongin sele acercaba, no porque le intimidara sino porque estaba impresionada por la situación.

Al parecer el mundo si es muy chico.

Let Us Save You ━━  Stray KidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora