La cena

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La noche se alzaba y ellos se preparaban, quedaba poco para que partieran a la casa de los Tonowari, Neteyam se visitó de forma simple, aunque un poco más formal de lo que iría a la preparatoria, fue un corto segundo en que se giró y vio a su hermano, quedó sorprendido, se veía bastante bien, demasiado bien a su parecer, había algo raro ahí, como dicen los humanos "acá hay gato encerrado".

-¿A dónde tan elegante?- mencionaba con una sonrisa burlona y un tono algo juzgador

-A la casa de los Tonowari, a donde más?- se hacía el tonto Lo'ak

-Tú sabes a lo que me refiero, no te vestirías así para ir solo a una cena- le decía entrecerrando los ojos como si llegara a ver algo más- Tira la sopa- terminó por decir para acercarse y terminar sentado en la silla del escritorio, lo seguía mirando interesado, en ese movimiento su pelo lo acompañó tan loco como siempre, en cualquier mundo su cabello lleno de trenzas tendría vida propia

-¿No te había contado ya?- decía algo molesto Lo'ak, aunque en realidad no estaba enojado

-Mmm- parecía que Neteyam pensaba apoyando su dedo en la barbilla y mirando hacia arriba- Es cierto!- dijo abriendo los ojos de repente, la palabra "ojos océano" vino a su mente al instante- Así que te estás preparando para ver a Tsireya- se notaba que había dado en el clavo- Ya me parecía que los veía muy juntos antes- divagaba en la silla giratoria para denotar el medio sonrojo en las mejillas de su hermano

-Ya deja de molestar- decía girando los ojos y terminando de acomodar sus cosas

-Deberías ver la forma en que te mira- comentaba tranquilo apoyándose en la mesa para ver por la ventana el estrellado cielo que observaban los humanos

-Niños, ya nos vamos!!- gritaba su madre desde el piso de abajo

-Vámonos- decía Lo'ak dándole la espalda y escapando por la puerta

-Kiri me dijo que habían hecho algunas actividades juntos!- le gritó como para que le quedara en la cabeza, era verdad que había podido notar la relación de ellos dos en ambos lados, se le hacía algo lindo el poder ver la hipnotizada forma en que lo mira la metkayina y como su hermano, a su manera, también deja su calidez, espera que puedan ser felices aquí y no sea como fue con su muerte y la guerra.

Realmente se había pegado un buen susto con la desaparición de su hermano por la broma de Aonung, estuvieron toda la tarde buscando, sus padres en auto y ellos caminando, obviamente no se podían separar porque era un barrio peligroso y no sabrían que podría pasar, todos estaban bastante preocupados y notó al de ojos océano algo pensativo, le parecían un poco raras sus actitudes, será igual que en Pandora o será diferente? Siente una sensación como de deja vu y cree saber lo que sigue, aunque en realidad con todo lo que está pasando ya no sabe con lo que puede salir Lo'ak ahora, maldito necio impredecible, bueno, debería saber lo que pasa siendo que ya lo vivió, pero no puede estar siempre en los momentos justos, solo se dejará fluir y que pase lo que tenga que pasar. Las estrellas lo acompañan en este viaje después de todo y espera que también lo acompañen en esta complicada noche, ojalá que todo llegue a ir bien, de hecho, hablando de la cena, debería haber bajado hace como 10 minutos, de seguro su madre lo cocinará para darlo de comer con sus ensaladas, ya se imaginaba cortadito en pedazos al lado del tomate y la lechuga, se levantó rápido y bajó casi corriendo, allí estaban en la puerta esperándolo y pudo notar la amenazante mirada cortarle el cuello lentamente, es un guerrero fuerte, pero esto lo derrotó. Solo entraron todos en el auto y partieron, antes de eso pudo escuchar un pequeño -te dije que andaba raro- en susurro de parte de Kiri, giró los ojos y no le prestó mucha atención, tendría que disimular y acostumbrarse al entorno, lo único bueno que le quedó de su forma humana fue su buen gusto para la moda, en eso sí que servía, ojalá sirviera para otras cosas, malditas costumbres humanas.

𝓛𝓪 𝓯𝓸𝓻𝓶𝓪 𝓭𝓮 𝓻𝓮𝓰𝓻𝓮𝓼𝓪𝓻 ° 𝓝𝓮𝓽𝓮𝔂𝓪𝓶 𝔁 𝓐𝓸𝓷𝓾𝓷𝓰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora