Pesadillas no tan pesadillas

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De un momento a otro, entre charla y charla, se devoraron los brownies, bueno, solo algunas personas habían comido. Pero empezaron a mencionar un curioso sabor proveniente del dulce, era como algo amargo, no estaban seguros, mas no pensaron que fuera otra cosa que canela, total, qué más podría ser. Todo parecía ir perfe, hasta que se dieron cuenta de que Lo'ak no tiene supuestamente rosácea, el tema era que sus mejillas brillaban y el calor empezaba a inundar su cuerpo. Poco después, como a la media hora, también cayó Rox con los mismos síntomas y sin pudor expresó que tenía algo parecido a una erección. Ahí la situación empezó a complicarse, ya que la hermosa metkayina se sentía mareada y veía todo como cuando tenés el efecto de mareo o distorsión en Minecraft. De hecho, todo empeoró cuando la chica Sully veía todo en blanco y negro, excepto por un detalle, que le contó solamente a Neteyam, el cual era un na'vi del bosque y ojos amarillos como un gato, quien suponía era su hermano. Claro que al segundo se pusieron a investigar y sin muchas vueltas descubrieron el problema, los brownies eran de los mágicos y ellos no habían tenido en apreciación la letra pequeña, como siempre, unos genios. Ahora, qué iban a hacer, o sea, estaban en la casa Tonowari y además se encontraban los adultos allí. Eso sí, arreglar el conflicto era aún más complicado con tres chiflados, cinco, aunque uno estaba bastante tranquilo el cual era Spider y a Neteyam no le generaba nada más que ver algunas cosas glitchear como si la realidad se rompiera de vez en cuando, consumieron cannabis y dos afrodisíacos, que igual las frutillas también son afrodisíacas, pero no pareciera que fueran frutas lo que le pusieron a eso. El mayor de los hermanos omaticaya no cree que esto sea tan fácil como un rezo a Eywa o rezar un arram sam sam, están en un gran apuro y capaz sería mejor salir a dar una vuelta por si se les pasa con el aire fresco para no causar un revuelo y que los descubran dentro del hogar.

-¡Nos vamos!- decidieron entonces avisar desde la puerta que se iban por las dudas, no querían enfrentarse a una Ronal enojada

-Ok, no vuelvan tarde y avisen cualquier cosa!— gritó en respuesta la madre desde la cocina tranquila

Aun estando en vía pública se comportan como unos locos, bueno, no es complicado saber el porqué. Realmente se sienten como si estuvieran en una montaña rusa, se divierten como nunca, pero igual y vomitan media vida.

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De cierta manera que ni él sabe, Neteyam se dio cuenta de que Tsireya estaba más ida de lo que debería por lo que supone que el cannabis le afectó más de lo esperado, sin olvidar que Aonung tampoco andaba en buenas condiciones para cuidar de ella y menos Rox que por alguna razón está chapando con Spider lo cual lo deja un poco sin palabras tanto como para simplemente girar la cabeza como si nada hubiera pasado. Por otro lado, no pudo dejar de pensar en cuántos brownies había, por lo menos estaba tratando porque siquiera tratar de pensar le provocaba unos pequeños dolores de cabeza, pareciera como si ya le estará bajando, eso le hace suponer que a él le pegó diferente y simplemente se sintió como si hubiera consumido alcohol, aunque un poco más droguis. Lo raro en todo fue que no tenía ninguna visión más que esos fallos de realidad, pero sentía esa jaqueca terrible cotidiana, que extraño.

Neteyam veía a sus hermanos un poco mareados y, aunque con uno estuviera peleado, no significa que no se preocupe de sus estados porque los quiere y ama sin depender de cómo se sienta al momento. Por eso, pidió un momento para descansar en algún local a tomar algo para ver que se les baje mejor la droga tomando aguita, de paso, comprueba que todos estén bien, no afectados y sí afectados, y les presta a cada uno su debida atención con cuidado y cariño para verificar el estado de todos. De hecho, al ver que la mayoría estaba cansada del frío de invierno, casi navidad, prefirió quedarse un rato y comprar dulces para pasar la tarde de forma más amena teniendo en cuenta que estaban en una acogedora e iluminada cafetería. Para aprovechar, ¿no?

𝓛𝓪 𝓯𝓸𝓻𝓶𝓪 𝓭𝓮 𝓻𝓮𝓰𝓻𝓮𝓼𝓪𝓻 ° 𝓝𝓮𝓽𝓮𝔂𝓪𝓶 𝔁 𝓐𝓸𝓷𝓾𝓷𝓰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora