Capítulo 9

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Esa fue la primera vez que Minjeong vio a Jimin de esa manera.

— ¡Acércate de nuevo si te atreves! —Jimin ya no se preocupo en ocultar su verdadero yo, pues el ver como Taeyeon intento apuñalar a Minjeong le hizo hervir la sangre de rabia.

Jimin se alegró de que fuera una Alfa S, de lo contrario, no hubiese podido salvar a Minjeong, furiosa señaló a la culpable y gritó—¡Ye Bai, ponte en contacto con un abogado para demandarla, haz que vaya a la cárcel y que nunca salga! —inmediatamente Taeyeon fue inmovilizada por Ye Bai y el cuchillo en su mano fue arrojado lejos.

El movimiento fue demasiado fuerte, lo que alarmó al personal que se encontraba en ese piso. Algunos que no conocían la causa y el efecto querían subir para ayudar a Taeyeon, pero fueron detenidos por el guardaespaldas llamado por Ye Bai.

— ¿qué están viendo? ¿le pagamos por ver chismes? ¡váyanse de aquí!

Jimin sabía que Minjeong se pone nerviosa cuando hay mucha gente, así que no quería que personas ajenas vieran las inseguridades de su esposa y se burlasen de ella por ello.

Ella protegió cuidadosamente a Minjeong en sus brazos, como un lobo cuidando su presa.

Todo el mundo se sorprendió, ¿cómo podría ser esta la inútil Tercera Señorita de la familia Yoo que habían visto anteriormente, la que siempre caminaba encorvada? Esa mirada fría y dominante hizo que todos los presentes se estremecieran.

La reprimida Taeyeon gritó de repente, no, no, no ¡todo está mal! esta no es la Jimin que conoce, la Jimin que conoce no se defiende y es una débil inútil— ¿quién eres tú? ¿quién eres tú? ¿¡quién mierda eres tú?! ¡no eres Jimin! ¡impostora! ¿¡quién eres?!

Jimin la ignoró y llevó a Minjeong a la sala de recepción, la acosto en el sofá y cerró la puerta con llave.

— ¿estas herida? ¿tienes miedo? Todo es culpa mía, no debería haberte traído aquí... Todo es culpa mía —Los ojos de Jimin permanecieron en Minjeong, sus círculos oculares estaban ligeramente rojos y sus manos temblaban un poco.

Lo que paso fue demasiado peligroso.

Minjeong tiene que admitir que esta forma de Jimin es fascinante y que le encanta la sensación de ser protegida por ella.

Cuando Jimin sostenía a Minjeong en sus brazos, la susodicha podía besar esos delgados labios con solo inclinar la cabeza, tenía demasiadas ganas de hacerlo, pero se resistió, pues aún no llegan a ese tipo de intimidad.

Minjeong sostuvo esas manos temblorosas y dijo a la ligera— estoy bien, gracias por protegerme —las yemas de sus dedos rasparon suavemente la palma de Jimin que estaba envuelta en gasa, ella sabía que para salvarla, Jimin no dudó en hacerse daño.

Cuanto más Jimin se comportaba así, más Minjeong sentía que no era digna de Jimin.

Jimin todavía estaba inmersa en lo que pasó y no vio los cambios de ánimo de Minjeong.

"Que acto tan cobarde dejar que me proteja" Aunque a Minjeong le guste la sensación de ser protegida, intentará ser más dominante en el futuro para darle seguridad a Jimin.

— Minjeong, huye cuando te encuentres en peligro en un futuro, no te preocupes por mí... Perdón, soy tu Alfa, se suponía que debía protegerte, pero al final... —Jimin se culpó a sí misma.

— Está bien, Jimin, no te preocupes —Minjeong no sabía qué decir.

— Hmm —Jimin también sabía que estaba siendo un poco exagerada, se inclinó y abrazó a Minjeong, sus mejillas estaban casi tocándose, inclinó la cabeza y sus labios tocaron accidentalmente el lóbulo de la oreja de la contraria.

Después de leer un libro, la cobarde Alfa se levantó (WinRina) (JiMinjeong)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora