Después de leer un libro, la cobarde Alfa se levantó (WinRina) (JiMinjeong)

Capítulo 18

No mucho después de que Xiao Zhang se sentara, se abrió la puerta.

Jimin se paró en la puerta, jadeando.

— ¿Xiaoyu?

— ¿Jefa Yoo?

— ¡Esposa!

Jimin se sorprendió, ¿así que la autora de esa novela era su esposa? ¡ella ni siquiera lo sabía!

— Sra Yoo, usted... —Xiao Zhang no esperaba que la autora de la novela fuera en realidad la esposa de su jefa.

— No es asunto tuyo, vuelve a la empresa —Jimin echó a Xiao Zhang.

— Cariño, ¿eres la autora de "Phoenix Yu Fei"?

Minjeong asintió y preguntó— ¿cómo sabes que estoy aquí?

Jimin encendió el teléfono y mostró los registros de chat de las dos.

— ¿así que tú querías colaborar? —Minjeong también se sorprendió un poco.

— Sí, algo pasó esta mañana y no pude irme, así que le pedí a mi asistente que viniera.

Minjeong no tenía dudas sobre ella.

— Oye, ni siquiera sabía que escribías novelas —Jimin se frotó las rodillas nerviosamente con la palma de su mano.

— No tengo nada que hacer en casa, así que escribo por diversión —Minjeong un poco tímida, escribía novelas para aliviar el aburrimiento diario.

Esa novela es como un secreto en su corazón, no quiere que la gente cercana a ella la interrogue sobre ello, por lo que nunca se lo cuenta a nadie.

Las dos películas taquilleras anteriores de Kim fueron escritas por esta autora-Minjeong-.

Es por eso que Jimin envió propuestas una y otra vez, y esta vez le pidió a su asistente que viniera a firmar el contrato, solo para firmar este guionista para el uso de su empresa.

— Bebé, ¿estás entrando en la industria del entretenimiento ahora?

— No, Aeri y yo abrimos una empresa de entretenimiento, y muy poca gente lo sabe.

— Ah, es así... —Minjeong ni siquiera lo sabía, principalmente porque Jimin nunca habla de la empresa en casa, y también ella nunca preguntó.

— ¿entonces colaboramos?

— Le pediré a mi asistente que vuelva a redactar los términos del contrato. Las condiciones anteriores no eran lo suficientemente favorables. Dado que es la obra maestra de mi esposa, debe comprarse con mucho dinero, pulirse cuidadosamente y prestarle atención.

Haciendo negocios con su esposa, Minjeong no sabía si venderle los derechos de autor o no— Si quieres usarla, no firmaré el contrato.

— ¿cómo puede funcionar eso? No soy la única dueña de la empresa. Además, mi esposa trabajó muy duro para escribirla. Cubriré todos tus libros a partir de ahora. El contrato se firma al más alto nivel, y nadie podrá mirarte en menos.

Jimin se sentó y tomó la mano de Minjeong.

— ¿por qué de repente aceptaste la invitación? No has respondido antes.

— Creo que la novela está a punto de terminar. Las condiciones que ofrecías eran buenas, así que quise aceptar para tener dinero propio y regalarte cosas.

El corazón de Jimin estaba lleno, estaba a punto de derretirse "cómo puedo tener una esposa tan linda?"penso mientras se inclinaba hacia adelante para besarla.