Renasco En Harry Potter Con Ojos Mágicos

Ayudame

Me levanté de la cama y sentí un fuerte dolor en la cabeza y casi todo mi cuerpo.

Mire a mi novia que dormía con una apariencia muy tierna, su mano derecha estaba aún atada a la cama recordándome lo que había pasado ayer a la noche.

Sonreí alegre y la abracé dándole besos en varias partes del cuerpo hasta que se despertó.

Ella se limpio el ojo izquierdo y trato de limpiar el derecho pero su mano aún estaba atada.

Su rostro se sonrojo bastante.

-Ayudame -reclamo aunque espero después de unos cuantos besos.

Me reí un poco y le quite la soga de la muñeca.

-¿Te gustó? -pregunto sin mirarme.

La abracé enternecido y bese sus hermosos labios.

-Muchísimo -murmure sintiendo su hermoso aroma a menta.

Ella me devolvió el abrazo y me mordió los labios y el cuello.

Siendo honesto estábamos haciendo este tipo de cosas desde que tuvimos ese inconveniente con Granger, Daphne obviamente quería marcarme como su propiedad y yo quería dejar mi ser dentro de ella.

-Hey... Vance... -murmuro masturbándome con su mano derecha.

Ella sonreía y pego su cuerpo al mío, cuando noto que estaba por acabar hizo que mi miembro apuntará dentro de ella así que termine llenándola de nuevo.

Mi novia sonrió satisfecha y murmuró...

-Si seguimos así me embarazaras... hoy no es un día seguro -dijo ella pícaramente.

Sonreí y mi mano acaricio su estómago un poco por encima de su pelvis.

-¿Cuál nombre le darías a mi hijo? -No tenía en lo absoluto miedo de que eso pasará.

Me sentiría mal porque ella no pudiera vivir su adolescencia de manera cómoda, pero cuando le hice esa pregunta sus ojos se iluminaron esperanzados.

Ella me miro a los ojos y fue como una lluvia de ideas.

Cientos de nombre con sus raíces y su lógica habían aparecido en mi mente.

La bese profundamente.

-Van... -murmuró retomando lo anterior -ayer hiciste algo que me gustó mucho... -Su rostro estaba muy rojo de la vergüenza.

-¿No crees que debería pensar en la tercera prueba? -le pregunté a lo que ella me miro como si fuera un tonto.

-¿Que importa eso? Yo soy más importante para ti que esa prueba -No se equivocó en lo absoluto.

Sonreí y la besé.

-¿Y?¿Cuál de todas las cosas que hicimos anoche? -le pregunté sonriendo.

Ella sonrió y me beso el dejando un chupón muy colorido.

-Los besos cuando me vendaste los ojos -dijo mirándome con ese sentimiento de sumisión.

Sonreí y mis manos le apretaron el trasero.

-¿Quieres seguir? -le pregunté sonriendo lleno de lujuria por ella.

***

Recién había terminado de cenar y estaba yendo a la biblioteca.

-Hey Van -me llamo esa hermosa voz. Con ese simple llamado me había olvidado de todo de nuevo.

-¿Si Hermione? -le pregunté con una mirada llena de amor y cariño.