¿Cliché?

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Habían pasado un par de días desde que se había llevado a cabo la cena, está había acabado muy bien, tan bien que inclusive después de ella y que cuando Brian lo dejo en su hogar le pidió formalizar su relación, al principio creyó que algo iba a cambiar entre ellos, pero los mensajes seguían siendo amorosos y graciosos, las llamadas igual de largas y el tiempo que disponían de poder verse seguían siendo el mismo pues ambos chicos estaban igual de ocupados con la escuela; le había contado a su padre con bastante vergüenza qué había formalizado su relación con Brian, su padre se alegró por ello y le comento que pronto debería de llevarlo a cenar si es que él estaba cómodo con ello a lo que Caden le dijo que lo pensaría no prometiendo nada, pues las cosas con su madre seguían igual de frías a pesar de que ya intercambiaban un par de palabras, no quería incomodar chico con el que estaba saliendo si es que iba a cenar a su casa y su madre regresaba o se encontraba allí. 

—Buenos días—. Es lo primero que dice el chico cuando entra a la cocina viendo a su mamá, intentando hallar a su padre con la mira sin mucho éxito.

—Tu papá ha salido desde temprano, te llevaré yo a clases.

—Claro, dame un momento y estaré listo—. El chico regresa a su habitación para tomar sus cosas y prepararse mentalmente para estar con su mamá por lo menos media hora que era lo que duraba el camino hacia su escuela—. Ya nos podemos ir.

La señora Hill le extiende a su hijo un par de billetes para que pueda comprar su almuerzo y regresar a casa el mismo si es que el padre de Nathan no lo lleva a su hogar, cuándo todas sus cosas están listas, madre e hijo sale de la casa para ir hacia la camioneta en dónde ambos suben y segundos después se ponen en marcha, la música de la radio sonando de fondo a un volumen lo suficientemente bajo como para hablar aunque ninguno de los dos dice algo.

—¿Cómo vas con la escuela?—. Pregunta la mujer sin quitar la vista de enfrente.

—Bien, nos han dejado menos trabajos y tareas este último mes por el tema de las universidades, para que nos concentremos mejor en ello.

—¿Ya tienes lista tus cosas para la universidad?

—Sí, desde hace una semana que las tengo listas, solo estoy esperando el día de apertura para la universidad.

—Estoy segura qué te quedarás, te has estado preparando muy bien durante el último año.

—Gracias—. Sin saber qué más decir Caden se queda en silencio.

—Tu papá me comentó algo hace un par de días.

—¿A si?

—Mira Caden, para mí ha sido muy difícil toda esa situación, conozco a Adel desde hace muchos años y Alexa un par de años más, conozco a Alice desde toda su vida y sé que tú eres mi hijo y que debería de apoyarte en todo pero no sé si pueda hacerlo—. Gira un momento para mirar a su hijo y regresa la vista enfrente—. Sé que ser gay no está mal pero siempre me hiciste creer qué te gustaban las chicas y tú sabes qué le tengo un cariño especial a Alice, sobre todo fue lo que pasó con tu hermana.