SoulMate «Sterek» (RTT#2)

Capítulo 20

Todo miembro que habitaba en aquella casa se había puesto en movimiento. Nathan había dado la orden de comenzar a preparar cada herramienta y arma para partir en cuanto tuvieran todo su equipo listo. Sus padres habían aprobado dicho plan.

Los lobos se habían ofrecido a ayudar en subir cosas, e iban y venían, aún cuando a varios cazadores les intimidaba o les molestaba su presencia. Incluso con ello, todos se movían con velocidad y trataban simplemente de dejar el trabajo hecho.

Nathan había acordado con Grayson que la misión y Stiles seguirían, con la condición de asegurar que el de lunares estuviera bien y que ademas estuviera con alguien que lo vigilara todo el tiempo. Grayson se encontraba con Stiles revisando y valorando cada uno de sus signos vitales.

—Aún mantienes una presión estable...—murmuró para si mismo el de ojos azules anotando rápidamente en su libreta. Stiles miró en un rápido vistazo los apuntes y curvó con cansancio sus labios, divertido por el otro.

—¿En serio es necesario? Creo que no podría empeorar más de lo que ya estoy.—Grayson levantó su mirada hacia él con una ceja arqueada.— Okay, es cierto, si puedo empeorar.—el cazador resopló.—Pero hey, eso quiere decir que si voy o no resultaría lo mismo, si estoy con ustedes serviría mucho más que quedarme encerrado.

—Acordamos que irías si te dejabas valorar, así que cierra el pico y deja que pueda inspeccionarte.—Stiles resopló con protesta.— Tampoco me hagas como caballo.—le mostró su lengua en un acto infantil y Grayson rió.— Inmaduro.

—Meh.—el cazador viró los ojos y siguió auscultando al otro. Se mantuvieron unos segundos en silencio hasta volver a escuchar al otro hablar.— ¿qué planean hacer?

Grayson vió a Stiles y luego dirigió su mirada hacia donde el rostro de este apuntaba; miembros cazadores llevando cargamento hacia las camionetas. Devolvió su atención al chequeo que realizaba y respondió mientras palpaba parte del cuello del de lunares.

—Llevarán equipo para poder vigilar el perímetro, también municiones de Wolfbane.—Stiles frunció el ceño con objeción inmediata.—Hay órdenes estrictas de que no dañen a tus amigos, relájate. Toda esa armería va para nuestro enemigo en común.

Stiles aún así mantuvo su ceño fruncido ahora con extrañes.

—Demasiado para un solo lobo, ¿no crees?—los ojos de Grayson miraron hacia los del otro, hizo una mueca y asintió.

—Mucho odio, muchas balas con dedicación personal.—murmuró tratando de así dejar por terminado el tema.

Aquella duda no solo se había presentado en la cabeza del soulmate, sino también en la de Grayson. Grayson había cuestionado la cantidad de hombres y de armas que se establecieron en llevar, pero la familia a cargo había aceptado sin chistar sobre llevar más que suficiente defensa. Aún estaba el miedo de perder otro miembro de su equipo, por lo que Grayson asoció aquella situación con dicha decisión.

Sin embargo, parecía que ambos chicos compartían un mal presentimiento por aquello.

Había terminado de inspeccionarlo, alejó sus herramientas médicas del cuerpo de Stiles y escribió unas últimas anotaciones extra.

—Bien, veredicto final: estás terrible, pero no tanto para no ir.

—Oh, nada que se escuche fuera de lo normal.—burló con ironía.

El de ojos azules le vió pensativo por unos segundos para luego levantarse y sentarse a su lado mirando nuevamente hacia la fila de cazadores que entraba y salía de la casa con cargamento. Stiles aceptó su compañía en silencio.