Es como si fuera una reacción, mis ojos se llenaron de lágrimas y al instante corrí hacia él, sus brazos me atraparon sujetandome cómo sí fuera a irme, y era posible que así fuera pero no quería pensar en eso, solo en Derek, sólo en él.
Nos separamos y yo, con las lágrimas cayendo le sonreí feliz y él solo me acariciaba el rostro algo desesperado, yo le tomé la cara y reí triste.
—Estás aquí—murmure, me sonrió triste y me besó, nos separamos y juntamos nuestras frentes.
—Por supuesto—su vos sonó ronca, como si estuviera al borde de el llanto igual que yo; acarició mi cabello y volvió a besarme.—, Siempre estaré contigo—sonreí aún llorando, con sus pulgares fue quitando las lagrimas y sonreí ante su tacto.— No llores, shh...—Me alejé levemente y lo miré algo acelerado.
—Pe...Pensé que no te encontraría, ¡desapareciste! Te busqué por todos lados y tú...—mi voz quebró y mordí mi labio tratando de no romper en llanto de nuevo como lo había hecho todos los días anteriores de que todo ésto sucediera. Su mano acaricia mi cintura y sonríe.
—Ssh, estoy aquí, lamento haberme ido pero yo... creí que tú...—sus ojos se cristalizaron.—Creí perderte, Stiles.—acaricié su mejilla y cerré mis ojos, con nuestras frentes juntas, disfrutando de la presencia del otro. Jamás había sentido una alegría y paz en mi como la hacía ahora.
—Lo lamento tanto—murmuré, pude sentir su mirada confundida.
—¿Por qué lo dices?—abrí mis ojos y las lágrimas invadieron éstos nuevamente. Joder, ¿es que no podía contenerlas sólo in poco?
—Por todo, de no ser por mi... mi padre, mi pérdida de memoria...,
—No, basta. Ésto no es tu culpa, él viene por mi, y yo...—titubea pero prosigue.— trataré de ofrecerme. Yo por ti, así ya no te hará daño.—fruncí el ceño.
—¿Qué? Espera, Derek no...
—Estarás con los demás, te protegerán, yo haré...
—No, no lo harás—me miró atonito, bajo la mirada y relamo mis labios.— Derek, no quiero que te haga daño, estoy bien, puedo hacerlo y...
—Stiles.
—No puedo—cerré mis ojos con fuerza conteniendo las lagrimas. Todo éste tiempo separado sin ninguna señal del otro y ahora volveríamos a estar separados, me habia hecho tanta falta.—No puedo dejarte de nuevo, yo no puedo, Derek, él...—me tomó de los hombros y negué levemente.— ¡Lo odio!—gruñi molesto pero sus brazos me atraparon sosteniendo mi cuerpo y eso volvió a debilitarme, estaba seguro que en algún momento me iría abajo. Me escondí en el puente de su cuello hombro y solloce aún mas.
—Todos lo odiamos.—mordí mi labio y suspiro.— todo está bien, Stiles, ¿si? Yo no pienso dejarte nunca más.
Era claro que no lo estaba.
Nada estaba bien.
Lo abracé más y susurre.—Te quiero.—se alejó y observé su pequeña sonrisa.
—Te amo—algo en mi se sintió tan perfecto al escuchar aquello, un sentimiento de felicidad y calma. Sonreí, con lágrimas y sollozos, pero sonreí.
—Yo también te amo.—-tomó mi mano y un cosquilleo se transmitió por ella; una calidez me invadió, nada nos rodeaba, estábamos en un lugar vacío, nada ni nadie, solo su mirada y la mía. Entrelazamos nuestras manos, (encajaban perfecto) me acerqué a él y besé sus labios lentamente, un fuego se propagó dentro de mi, me separé y lo observé. Nuestras manos se apretaron mas.
-Mi alma reconoce tu alma. Honro el amor, la luz, la belleza, la verdad y la bondad dentro de ti, por que también está dentro de mi. Al compartir éstas cosas no hay diferencia ni distancia entre nosotros. Somos lo mismo. Somos uno. Somos almas gemelas.
La fuerza abandonó mi cuerpo y antes de caer contra el suelo, Derek me sostuvo, fue recargandose en la pared para luego sentarse en el suelo y sentarse conmigo en brazos. Mis parpados pesaban.
-Descansa... Yo te protegeré.
