Capítulo 18

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El moreno se había sorprendido de lo atentos que estaban a su llegada pero asintió con detenimiento.

—Hola, Nathan.—el menor de la familia se hizo a un lado y les indicó que pasaran.

Conforme entraban sus cuerpos se tensaban al notar las miradas fijas y reacias de varios presentes.
Un ambiente pesado se establecía, y conforme uno a uno se adentraba a la casa, sus músculos se contraían a la defensiva. Ver una decena de hombres esparcidos por el segundo piso y a sus alrededores no les calmaba en ningún sentido.

Peter venía sujetando con discreción el suéter de Liam y al notar el ambiente no dudó en cubrirlo y llevarlo detrás de él.

—Lamentamos que les parezca incómodo la compañía de algunos de nuestro clan, pero no parecía algo sensato tener un grupo de lobos en nuestra casa sin algo de protección.—comenzó la mujer de la casa.

Scott asintió comprensivo.—Lo entendemos, es solo que también parece una amenaza para nosotros.

—Lo menos que queremos es lastimarlos.

Con cierta incomodidad, todos asintieron y comenzaron a esparcirse tomando asiento o quedando cerca de los otros. Lydia empujaba con cuidado la silla de ruedas de Stiles mientras éste veía con detallada atención cada persona que sus ojos alcanzaran escanear.

Una sala bastante amplia donde estaba un juego de sofás de cuero con una mesa de centro de cristal, el suelo era de madera oscura y las paredes eran lisas de un azul opaco que eran adornadas por unos cuantos cuadros; las escaleras eran de caracol y su inicio se ubicaba en una esquina y a lado de ellas estaba un escritorio de madera igual de oscura que el suelo en el que se encontraba . Tres puertas blancas cerradas estaban esparcidas en las paredes que los rodeaban y alado de ellas había un servidor de la familia bien armado. Al inicio y final de las escaleras había un par y a lo largo de las paredes se encontraba otro grupo de... si, Stiles logró contar siete personas.

Paseó su mirada por cada cazador hasta encontrarse con un par de ojos azules que expresaban estar a la defensiva. Stiles había tomado instintiva atención por ese sujeto en particular al notar no solo defensa en su mirar, sino curiosidad también. Algo que sabía identificar y que sentía de igual modo.

La familia de cazadores tenía sus propias opiniones de primera impresión sobre la manada. Grayson confiaba plenamente en Nathan, debía averiguar entonces porque el de ojos grises tenía tanta esperanza en aquella manada. Y el pecoso había obtenido su inmediato interés.

—Nathan, trajimos a un amigo que comparte su trabajo. Es líder de la familia de cazadores de BaconHills, su nombre es Chris Argent.—presentó Scott ante el chico de ojos grises.

Aquel nombre logró despertar todos los sentidos del padre de la familia. Se abrió paso de entre su hija e hijo y se posicionó frente al nuevo miembro. Al mirar el rostro contrario sintió una genuina sorpresa.

—¿Argent? ¿Chris Argent?—el mencionado frunció el ceño al escuchar su nombre, aunque aquella voz le hizo recordar.

—¿Patrick?

Una risa salió de los labios del pilar de la casa y dio pasos hacia el centro siendo imitado por el colega cazador de la manada. Ambos hombres eran vistos con confusión e incredulidad por todos los presentes a su alrededor. Ambos soltaron una risa emocionada y alegre mientras se acercaban con brazos abiertos hacia el otro y se estrechaban con fervor.

—¡No puede ser! Es increíble encontrarte aquí, creí que te irías a Texas después de acabar parte de tu entrenamiento.

—Oh no, mis raíces siempre fueron de gran influencia para mi. No podía abandonar este pueblo.

SoulMate «Sterek» (RTT#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora