Alas Rojas | SanSang

14 (Final)

Tras abandonar ese mundo oscuro, los alados se encargaron de exterminar a cualqueir ser que haya logrado salir hacia el mundo humano, e hicieron que la normalidad retorne y que la gente no pudiera recordar lo que habia ocurrido.

Yeosang fue de los ultimos en enterarse lo que estuvo ocurriendo en el mundo oscuro. Aunque debió sospecharlo cuando el grupo de alados lucharon para mantenerlo protegido. Solo despues se enteró de esa batalla, al ver llegar a su papá alado con la mitad de su cabello de un color diferente.

La marca de un demonio que devolvía la vida. Sonaba a un cuento, aunque Hongjoong repudiaba mas que nunca a Seonghwa. Es cierto que lo salvó, pero a un costo grave, estaba marcado por siempre, por el estigma de 'Un demonio salvó la vida de un alado'.

—¿Estas despierto?

Yeosang vió a su padre alado ingresar a su habitacion. Su mirada fue inevitablemente al cabello de su padre.

—Te ves muy bien con ese look.

—Cuidado con lo que dices Yeosang o podria enfadarme— Le advirtió el alado sin real seriedad en su voz.

—Lo digo en serio, ademas solo es cabello... me alegra que Seonghwa te haya salvado la vida, al menos le agradezco eso.

—Como sea— Hongjoong se sentó al filo de la cama, viendo a su hijo con un mejor semblante, aunque él extrañaba las alas tan únicas que su hijo tuvo. —¿Por qué dijiste Seonghwa y no padre?

—Quizá llevemos la misma sangre y todo eso, pero siento que le falta mucho para que se gane el título, por ahora el título de padre solo te pertenece a tí.

Hongjoong sonrió al oirlo. Se sentía alagado.

—Hice algo de comer ¿Vienes conmigo?

Yeosang movió su cabeza, tenia hambre y tambien sentía que ya no hacia falta seguir lamentandose por algo perdido.

Frente a Yeosang, fue dejado un plato de cereal sin azucar y leche, ademas de fruta picada. Tras levantar la mirada para convencer a su padre para comer algo dulce como un pastel, no logró nada.

—Tambien debes comer frutas y vegetales, por el bien de tu salud. Comer pasteles en exceso no es bueno— Le recordó.

Yeosang se llevó a la boca el cereal con leche, haciendo una mueca por el desabrido sabor.

Tras unos toquidos, Mingi ingresó al departamento, con algunas bolsas con comestibles para llenar la despensa.

—Hola Yeosang— Saludó levantando la mano.

—Hola— Respondió el castaño.

—Mingi, ven conmigo, hay un favor que necesito pedirte.

Hongjoong se llevó a Mingi. Ambos salieron fuera del departamento, como si el tema fuera un asunto de confidencia.

Yeosang levantó los hombros, luego su atencion fue al telefono que sonana. Avanzó para tomarla y la acomodó en su oido.

—Hola.

—¿Yeosang?

—San— Sonrió al reconocerlo.