IV. Descanso

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Todos pueden estar mal
todos pueden querer llorar
querer gritar
un hombro encontrar
donde su cabeza reposar

Depositamos nuestra fe en cosas vanas
que nos hacen tropezar
que nos sacan del camino por el que debemos pasar
mi pie muchas veces esa línea cruzó
a pesar del equilibrio buscar

Encontré a personas que su lhombro me ofrecían
pero fueron efímeras en mi vida
fueran estrellas
pero al igual que las que en el cielo están
se marcharon como una estrella fugaz
y su brillo fueron a dar
en otra galaxia quizás

Y cuando perdida me sentía
sin saber con quién mi nudo desatar
y las cosas hablar
llegó el
el que mis heridas sanó
y mi corazón limpió
a él le debo mi devoción
gracias Jesús
porque ahora libre soy.

Las flores que crecen en mi corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora