Capítulo 68

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1:¡Nuevo capítulo dónde los Stirlyng la pasan con Giana y los niños!

2:¡Tendremos una apareció de Artemisa y Zadquiel hoy!

Salgo de la ducha secandome la cabeza con la toalla, desde aquí puedo escuchar a los niños jugar

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Salgo de la ducha secandome la cabeza con la toalla, desde aquí puedo escuchar a los niños jugar

Una sonrisa se instala en mi rostro, decido salir de la habitación luego de vestirme y me recuesto del barandal del segundo piso viéndolos correr de un lado al otro

–¡No tienes escapatoria!–Raziel tiene sus manos como si sostuviera un arma y le apunta a Amenadiel –¡Rindete y entrégame todo!

–¡No!–Le contesta él desde el suelo–¡Jamás, soy el líder de la magia Rusa!–Eso hace que frunza mi ceño–¡Yo jamás me riendo!

–¡Pues yo soy de la magia itaniana!–Le contesta ella sin dejar de apuntarle

Pienso abrir la boca para preguntarles que están haciendo pero soy interrumpida por el sonido del timbre

Le miro unos segundos y los niños miran la puerta sin moverse unos minutos pero luego siguen con su juego

Bajo las escaleras trotando y al llegar a la puerta no dudo en abrir.

–¿Debería de empezará a preocuparme por esto?–Eros sonríe mientras esconde las manos en una chaqueta de cuero verde oscura

–Vengo con un solo propósito –Le miro con mis cejas fruncidas y antes de que pueda preguntar que sucede me toma guindandome en su hombro

–¡¿Que crees que haces!?–Chillo de sorpresa y da un paso al frente chiflando hacia los niños –¡Eros!

–¡Se van a casa con nosotros hoy!– dice y escucho a los niños chillar –¡Vamos, el último en salir no comerá pizza!

–¡Nadie comerá pizza!–Me remuevo intentando bajarme mientras noto como los niños salen–¡Niños sus pantuflas!

Los gemelos se detienen aedio camino y se voltean rápido para ir a colocarse algo en sus pies, sigo peleando con Eros, quien entra tranquilamente a mi casa y azalta mi nevera

–¡Eros la sangre me sube a la cabeza!–Me ignora tomando unas cuantas galletas–¡No te comas las galletas de los niños!

–Son mis hijos y tu mi mujer –Contesta zampandose tres–Tengo todo el puto derecho en comer lo que haces

Me logro alzar un poco, tengo la respiración acelerada por el esfuerzo y le golpe la nuca

–¡No digas malas palabras!

–¡Ta mos listos papá Eros!–Giro la cabeza para ver a Raziel quien está agarrada de la mano con Amenadiel

Creo que Eros sonríe no estoy segura, solo se que deja de comerse las galletas, toma una bolsa metiéndolas ahí y se gira hacia los niños

Stirlyng [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora