Bitácora de Jaun, 05 de junio 9:00 Pm

2 0 0
                                    

Ya han pasado 4 meses desde que escribí en mi bitácora, después de lo ocurrido aquel día no tuve mucho tiempo libre por la reconstrucción de Oribos, poco a poco vamos levantando la ciudad y con Eri a la cabeza ahora es más eficiente todo, al final si logro ser una gran líder.

Pronto será hora de que me valla, no quiero causar más problemas, decidí seguir mi camino y conocer más de este mundo y los demás dragones, sé que Ivy y yo no somos los únicos con un cristal, tengo el presentimiento de que en algún momento nos tendremos que reunir, hablare con Eri acerca de mi decisión, pero por lo pronto quiero que Oribos quede totalmente restaurada, mi armadura cumplió su cometido, pocos rasguños que pueden ser reparados fácilmente, mi espada intacta, ni una muesca en su filo, más tarde iré con Thaldrux para pedir algo de información sobre las demás ciudades.


12:00

Paseando por la ciudad me di cuenta que algunos de los habitantes me evitaban, puede que sea por mi despliegue de ira en la batalla, fui a ver a Thaldrux como tenía previsto, antes de que le preguntara sobre las demás naciones me quiso hacer un análisis, tanto a mi como a la gema de Zekhran, lo que encontró me dejo un poco asustado, es algo que no se digiere tan fácil, me comento que la gema, además de contener el alma del dragón también estaba imbuida en energía del abismo, esto puede ser debido a la gran batalla de la fisura, puede que Zekhran haya sido infectado con esas oscuras energías llevándolo a su deceso, me pidieron mucha discreción en cuanto a las batallas, que me mantuviera a raya si era posible para evitar que esa energía surja de nuevo, me dio un anillo que según él, mantendría bajo control la oscuridad en caso de que tuviera que pelear, luego de eso procedí a pedirle la información que necesitaba, me dio varios libros con las ubicaciones y costumbres de los reinos, para que los estudiara y no cometiera alguna estupidez que llegara a causar un problema, le di las gracias por todo y el sin previo aviso me dio un abrazo, sus palabras me hicieron soltar algunas lágrimas, -Muchacho, te debo la vida, todos en Oribos te la debemos, se que pronto te embarcaras en una aventura tu solo y se que será duro ya que solo nosotros te vemos con buenos ojos por ser nuestro protector, tendrás una senda difícil que afrontar pero ten la seguridad de que si llegas a necesitar ayuda nosotros acudiremos sin pensarlo-.

Fueron palabras que pocas veces, por no decir nunca escuche de alguien en mi mundo, sentí el apoyo que siempre anhele, luego de eso Salí de la gran biblioteca para disponerme a estudiar los libros que me había dado, serán unos días algo largos mientras decido que rumbo tomar, tengo que hablar con Eri, quiero que sepa lo que pasa con el cristal, para que no sienta temor, eso lo hare mañana, hoy procurare comprar algunas cosas para el viaje como comida, pociones, un bolso, quiero ir preparado para cualquier eventualidad, no sé qué me depare allá afuera pero se que en Oribos está mi hogar, las personas que quiero y jure proteger, mi pueblo, aunque sea humano fueron ellos quienes me acogieron y me dieron la mano.

Pronto marchare, pero sé que tengo un lugar al cual volver, y eso me hace muy feliz


Jaun fuera . . . 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 19, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Bitácora de Jaun, el descenso de un heroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora