Capítulo 70

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La aparición de Lu Wei'an fue sólo un corto tiempo. Yan Yue no se lo tomó en serio, pero cuando regresó a casa de los Yan, escuchó un mensaje del ama de llaves. Su madre estaba interesada en presentar a Yin Ya a Lu Wei'an.

Aunque Yin Ya tenía la mitad de la sangre de la familia Yin en sus venas, su padre sólo había sido el guardaespaldas de Yin Qinglan y había ascendido al poder enamorándose de ella. Todos estos años, el estatus de Yin Ya siempre había sido incómodo y le resultaba difícil encajar en el círculo de Yan Yue. Ahora, a medida que Yin Ya crecía cada año, Yin Qinglan empezó a pensar en el futuro de Yin Ya. Sin embargo, dados los antecedentes de Yin Ya, era difícil encontrar una pareja adecuada. Pero cuando Yin Qinglan conoció a Lu Wei'an, se le ocurrió esta idea.

Las comisuras de los labios de Yan Yue se curvaron en señal de burla mientras escuchaba. Su madre realmente quería lo mejor para Yin Ya. De todas formas, a él no le importaban mucho estas noticias. Él no tenía nada que ver con quién quería casarse Yin Ya, y era incluso mejor si Yin Ya podía casarse con la familia Lu. Ye Kang estaba bromeando antes de que Yan Hai era probablemente el único que se atrevería a casarse con la familia Li en ese momento. Ahora que Yan Yue pensaba en ello, pensó que sería interesante si realmente era como decía Ye Kang.

Viendo que estaba de buen humor, el ama de llaves le contó otra noticia. Yan Shihui quería verlo.

Yan Yue hizo una pausa, la burla en su rostro se hizo más profunda: "Ya veo".

A diferencia de Yin Qinglan, que no había cumplido con su deber maternal desde que tenía seis años, Yan Shihui se las había arreglado de alguna manera para cumplir con su deber paternal. Aunque se había mudado de la mansión de la familia Yan, volvía a ver a Yan Yue de vez en cuando y estaba muy atento a la educación de Yan Yue. Cuando Yan Yue era joven creía que su padre no tenía la idea de cambiar de heredero. De lo contrario, su padre lo habría criado como un petimetre, ignorante y perezoso.

Sólo cuando Yan Hai y Yan Qian crecieron, el corazón de Yan Shihui empezó a cambiar gradualmente. En comparación con el hijo mayor que estaba destinado a tenerlo todo, el segundo hijo y la hija menor se quedarían sin nada después de su muerte. Lo que Yan Shihui probablemente más quería era que Yan Yue y Yan Hai tuvieran una buena relación y que los dos hermanos trabajaran juntos para desarrollar Hopewell, para que pudiera poner su mente en paz cuando Hopewell fuera entregado a Yan Yue. Sin embargo, Yan Yue siempre había odiado la existencia de Yan Hai y Yin Ya desde que era un niño, y se negaba incluso a jugar junto a ellos. Yan Shihui no podía hacer nada con Yan Yue, y con ello, incluso los derechos de herencia de Yan Yue sobre Hopewell se vieron sacudidos.

Después de cambiarse de ropa, Yan Yue fue a la sede de Hopewell por su cuenta, sin llevar a An Jie. Durante tantos años, Yan Yue nunca había puesto un pie en la nueva casa de Yan Shihui. Padre e hijo hablaban de cosas en la mansión de la familia Yan o en la sede de Hopewell.

Al recibir la noticia de que Yan Yue venía, Yan Shihui pospuso todos sus preparativos para la tarde. De sus tres hijos, Yan Yue era el más parecido a él, tanto en personalidad como en comportamiento. El propio Yan Shihui comprendió que lo mejor era que Hopewell pasará a manos de Yan Yue. Pero el problema era que Yan Yue tenía demasiados prejuicios contra Yan Hai y podía prever que una vez que se hubiera ido, Yan Yue definitivamente suprimiría a Yan Hai hasta que no tuviera lugar en Zhongjing.

Para Yan Shihui, las palmas de sus manos eran de carne y los dorsos de sus manos eran de carne (ambos eran queridos). Yan Yue y Yan Hai eran sus hijos. La razón por la que había estado reprimiendo a Yan Yue todos estos años era porque esperaba que Yan Yue cediera y diera un paso atrás para reconocer a Yan Hai como su hermano menor. Desafortunadamente... Yan Yue era demasiado parecido a él. Incluso el temperamento de Yan Yue era exactamente igual al suyo cuando era joven.

La vida cotidiana de el pastoral [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora