El Juego de la Mafia | DongHae

🥀 Introducción

¿Alguna vez jugaste al juego de la mafia o viste como se jugaba?

¿Qué pasa cuando atrapan al infiltrado? ... Termina ¿cierto?

Esto sucede en la vida normal y no querrán saber lo que le pasa al infiltrado, más cuando es de la mafia más buscada y fuerte de Corea entre otros países.

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Choi Moongi

Ha Moongi, tomo la vida de su madre al nacer privándose de su amor, pero no el de su padre, quien la crió y cuidó en el ámbito del ejército ya que él ocupaba un puesto en las fuerzas especiales. Aunque no la veía tan de seguido y su abuela era quien la cuidaba, él siempre que podía estaba con ella, procurando pasar el mayor tiempo posible a su lado.
A los 13 años su abuela murió, su padre Ha HaDong un prestigioso General de Brigada decidió que ingrese a Academia de la armada para tenerla cerca. Su padre se encargó de enseñarle muchas cosas en su tiempo libre y Moon con gran agilidad y rapidez las aprendía .

Cuando cumplió 16 recibió el peor regalo de su vida, una carta. Esa carta citaba a su padre para declarar por corrupción. Su padre nunca le dijo nada, ya que ella lo odiaba por hacer algo tan sucio y bajo, así que a la hora de hacer la sentencia él fue acusado culpable, y por ende, su castigo fue la muerte.

Moon devastada por lo ocurrido se quedó en su casa sin siquiera asistir a la academia.

Pasó una semana de la muerte de su padre cuando violentamente ingresaron a su casa. Era de noche y en la casa solo entraba la luz de afuera. Moon estaba en la oficina de su padre, al escuchar el ruido salió y se cruzó a dos tipos. Recordando su entrenamiento los noqueó y antes de que pudiera llegar al arma que estaba escondida en la cocina, lograron reducirla entre dos, al parecer solo entraron cuatro. La llevaron hasta el living de su casa y la arrodillaron ante un hombre grande que solo mostraba un aura de miedo y respeto.

-¿Donde está?- se escuchó de esa silueta enorme, ella no contestó -tu padre ¿donde está?

Moon sonrió con sus labios partidos y con la sangre que le quedaba en la boca, por uno de los tantos golpes que recibió, le escupió en los zapatos del tipo. El tipo enojado le tomó del mentón y le levantó la vista.

-Si querías verlo llegaste tarde- ella contestó.

-¿En donde está?- la voz del tipo mostró más enojo.

-Bajo del suelo- volvió a sonreír burlonamente.

-¡Mierda!- soltó el rostro de Moon y miro a un lado colocando sus manos en su cintura -suéltenla, nos vamos- empezó a dirigirse hacia la puerta.

Una vez dada la orden los hombres la soltaron y ella se puso de pie.

-¿Qué asuntos tenías con él?- preguntó y el tipo frenó.

-Él tenía información valiosa- se giró a verla -y por lo que veo tú no- volvió a girarse para irse.

-Choi ¿verdad?- él freno otra vez -tu padre y el mío... Los mataron injustamente- se giró lentamente -hace una semana lo mataron por corrupción- se escuchó un silencio en la habitación -el nombre de tu padre figuraba en el expediente.

-¿Cuál expediente?- empezó a caminar hacia la dirección de la joven.

-Choi Siwon, 20 años de edad, apodo Masi... ¿tengo que decir más?- tomó del cuello a la joven levantándola un poco -escucha tenemos el mismo fin ¿por qué no trabajamos juntos?- él la bajo y empezó a reírse.

-No te necesito, eres inútil- se dirigió a la puerta de nuevo.

-¿Y tus otros dos hombres?- dudó en frenar pero siguió -¿realmente crees que tu nombre y edad van a estar en un expediente?- frenó completamente.

-Vamos- ordenó, miró a la joven de pelo castaño corto y dijo -tú vienes con nosotros-

Moon pensó que si él pudo entrar a lo que era una casa de un General de Brigada podía ayudar. El hombre musculoso llamado Siwon sabía que si noqueó a dos de sus mejores hombres y tenía su información, esa chica le iba a servir.

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Lee Donghae

Lee Donghae nació en una familia lleno de amor, su padre ingresado en el ejército y su madre se dedicaba a él, su padre y su casa. Se crió en las mejores academias, hasta los 16 cuando tuvo la oportunidad de inscribirse en el ejército con la autorización de sus padres. Su padre orgulloso de que quiera seguir sus pasos le dio su consentimiento. Llevo un gran desempeño y actitud durante tres años de entrenamiento y los 19 logra su objetivo de entrar a las fuerzas especiales, donde estaba su padre, solo que no estaban en la misma tropa.

Demostrando que lo genio y la perfección existía en él, a través de su comportamiento y logros, a los 22 años ingresa a la tropa donde se encontraba su padre, Reverse, aunque otro ocupaba su puesto, ya que su padre se dio de baja de las fuerzas especiales. Su padre murió un día después de haberse dado de baja por un asalto, que aún no estaba en claro.

Donghae con 23 años logró con esfuerzo y dedicación cambiar de tropa e ingresar a Madness, una de las fuerzas principales de Corea, así superando a su fallecido padre. A los 25 años tras estar invicto 4 años en misiones, dentro y fuera de Madness, logra ser líder de escuadrón bajo el rango de coronel.

Pero avanzar grandes pasos y con gran eficacia provocaba miedo y furia en sus mayores, tenía todo el tiempo problemas con aquellos que lo odiaban. A toda costa evitaban que su desarrollo.

Un día luego de otra misión cumplida junto con su tropa, fue llamado a la oficina del Capitán General, la máxima autoridad del ejército.

-Descanse- dio una orden una vez Donghae entró. - He oído que quieres ascender de rango ¿verdad?- preguntó sentado desde su gran sillón detrás del escritorio

-Sí señor- contesto firme y mirando al frente.

-También según tengo entendido tus superiores te lo ponen difícil ¿o me equivoco?- se paró.

-No se equivoca señor- volvió a contestar firme y mirando al mismo punto que antes.

-Le tengo una misión nueva- empezó a dirigirse hacia el coronel Lee. -queda en usted aceptarla o no. -se puso al lado de él mirando su perfil y Lee seguía mirando al frente. -pero si lo hace tenga por seguro que saldrá del rango en el que se encuentra y subirá dos rangos automáticamente- el coronel se giró a ver al capitán general -¡vista al frente!- Donghae hizo caso a la orden -su tropa será recompensada generosamente y obtendrán unas estrellas más en su uniforme, que dice ¿acepta o no?

El coronel Lee sin pensarlo dos veces respondió.

-Es un honor para mí y mi tropa aceptar esta misión- su voz sonó más decidida y firme que nunca.

-Muy bien acá tiene la información- agarro la carpeta que se encontraba sobre su escritorio y se la dio a Donghae-se puede retirar.

El coronel Lee dio una reverencia y se dirigió a la puerta cuando la voz del Capitán General lo detuvo.

-Donghae... Haz lo mejor que puedas, tu padre estaría muy orgulloso si te viera ahora-

-¡Gracias señor!- respondió sin girarse.