Ya había pasado el tiempo y tenía 9 meses.
Estaba que reventaba, ya tenía meses que no veía a slash. Los chicos dijeron que casi no iba a ensayar y pensaban en correrlo de la banda, pero les dije que no lo hagan, que le den otra oportunidad porque no debe ser fácil tener una hija. Si, fue una niña.
—No se parece en nada a el.—hablo Susan
—¿Que?
—La hija de Renee
—Tal vez salió a ella.— dije mordiendo mí fresa con chocolate.
—Puede ser pero no creo que sea de el.
—¡Ya basta Susan! Lo es y no hay vuelta a atrás.
—Como tu quieras, no puedo cambiarlo.
— hablo feliz
—¿Te sientes bien rubia?— la mire extraño
—Es que— dijo feliz con una sonrisa de par en par
—Habla que me angustias—Señalo su estómago y la mire confundida hasta que entendi—¡Mierda!¡No puede ser!—Sonrei feliz y la abrace como pude.
—Lo se voy a tener un mini Duff.
—¡Hay no te creo!¡Voy a colapsar!
—¡Ten cuidado con el bebe!
—Lo siento. Me emocione.
—Se nota—rio
— Y ya......—sentí un líquido correr por mí pierna y dolores bajo mí panza.
—¿Estas bien?—Me miró preocupada—¡Rompiste fuente!—Dijo mirando el suelo
—Llama a los chicos por favor, llama a Axl.
—Sisi los llamo, ¿Donde está el bolso?
—Ahi en el armario..
—Bien, voy por ella mientras los llamo.
¡Por dios nunca creí que las contracciones sean tan fuertes! Me quiero matar y a la vez vivir para conocer a el mini Slash, era un pequeño niño ,si y eso me emocionaba.
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—Halo?
—Axl ven rápido al hospital Chris va a parir
—¿Mierda, ya voy para allá!
—Te espero en la sala de espera adiós.
—¿Que paso viejo?
—¡Ya va a nacer! ¡Tenemos que irnos ya!
—¡Mierda! ¡Vamonos!—hablo rápido el pelinegro
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Ya estaba en la sala de partos y me pusieron anestesia pero se sentía igual el dolor. Yo lloraba mientras el doctor veía mí dilatación y estaba al diez así que había llegado la hora.
Axl me acompaño en todo el proceso en el que nacía. El era mí mejor amigo y quería que esté ahí conmigo para darme su mano aunque hubiera preferido que fuera Slash.
Se escuchó el llanto del bebé y me lo pusieron en el pecho en una manta azul bebé que le había comprado popcorn, la deberíamos lavar luego de esto.
—Mira es un mini rulitos.
—Lo es, mira sus pequeños ojitos Axl —dije llorando, este fue uno de los momentos más hermosos que pude tener.
