-Hola-, dijo Harry, saludando al tembloroso y desordenado elfo doméstico, -¿quién eres?-.
-Soy Dobby señor, Dobby el elfo doméstico-.
-Pues encantado de conocerte Dobby, y ya sabes que me llamo Harry, ¿puedo preguntar qué haces aquí?-.
-Sí señor Harry Potter, Dobby ya ha oído todo sobre el gran Harry Potter, vencedor de Aquel-que-no-debe-ser-nombrado. Todo el mundo conoce esas historias. Pero Dobby ha venido a advertirle, Harry Potter no está a salvo, Harry Potter debe abandonar este lugar de inmediato-.
-Oh, ¿por qué?- Preguntó Harry.
-El mago que vive aquí es el señor oscuro. Conoce a mi amo y mi amo no es un buen hombre. Oh, malo Dobby, malo malo malo-, chilló el elfo y empezó a golpearse la cabeza contra la pared.
-Para Dobby, para, no hace falta que te golpees la cabeza-, suplicó Harry, desesperado, -te harás daño-.
El elfo se detuvo de repente y volvió hacia él sus grandes ojos llenos de lágrimas. -Oh, Harry Potter es amable, muy amable. Dobby había oído hablar de la grandeza de Harry Potter, pero no de su bondad. Y pensar que se preocupa si un elfo humilde como Dobby está herido-.
-Claro que me importas, Dobby, y te agradezco que te arriesgaras a advertirme sobre el... mago oscuro, pero... ¿qué quieres que haga? ¿Debería ir a Hogwarts?-.
-¡No señor!- Dobby explicó -Hogwarts no, Hogwarts no es seguro-.
-Ah, querrás decir por haberme enfrentado allí a Voldemort a finales del año pasado-, supuso Harry.
-No el nombre, señor-, se lamentó Dobby, agarrándose las orejas, -habla no el nombre-.
-Lo siento, Dobby, debería recordar que no a todo el mundo le gusta-, se disculpó Harry, pensando en Severus y en cómo se estremecería de dolor al mencionarlo. La única razón por la que Harry aún no tenía por costumbre referirse a él como el señor tenebroso era para que Dumbledore no cuestionara el repentino cambio cuando volviera al colegio.
-Sí, Dobby se había enterado de que Harry Potter había vuelto a encontrarse con el señor tenebroso hacía apenas un par de semanas y que, una vez más, había conseguido escapar con vida-. Harry asintió. -¡Dobby lo sabía! Harry Potter es valiente y arrojado, pero Dobby ha venido a decir que Harry Potter no debe volver a Hogwarts-.
-¿En serio? Pero, ¿y mi educación? Debo volver si quiero ser mago-.
-No, no, no-, gritó Dobby, -¡Harry Potter es demasiado importante! ¡Harry Potter debe permanecer a salvo! Si Harry Potter vuelve correrá un peligro mortal-.
-¿Por qué?- se burló Harry, pensando que después del año anterior eso no era ninguna novedad.
-Porque hay un complot, Harry Potter, un complot para que este año ocurran las cosas más terribles en Hogwarts-, susurró Dobby. -Dobby lo sabe desde hace meses, señor. Harry Potter no debe ponerse en peligro, es demasiado grande, demasiado bueno-.
-¿Qué cosas terribles?- preguntó Harry, -¿quién las trama?-.
Dobby emitió un horrible sonido ahogado y luego empezó a golpearse la cabeza contra la pared. De pronto la puerta se abrió y Severus apenas parpadeó al extraño elfo antes de petrificarlo.
-Me había preguntado por qué tardabas tanto cuando oí un extraño ruido de golpes y vine a investigar-, comentó Severus. -¿Puedo preguntar qué hace el elfo doméstico de los Malfoys en mi casa?-.
-Por lo visto, ha venido a advertirme sobre una especie de complot que lleva meses tramándose-, explicó Harry, -uno que, al parecer, me pondrá en "peligro mortal" si vuelvo a Hogwarts-.
ESTÁS LEYENDO
THE PRICE OF FREEDOM
FanfictionDespués de su enfrentamiento con Voldemort al final de su primer año, Harry decide que ya está harto de que los Dursley lo presionen y, dado que Dumbledore no lo dejaría ir a ningún otro lado, decidió tratar de negociar su libertad. ¿Qué resultará d...