Estaba preparando el almuerzo, y mientras terminaba de cocinar unas cosas en el horno, decidió ir a la habitación con Blake, encontrando al muchacho con las niñas que se habían despertado.
Sí, sabía que su olfato era muy agudo, pero aparentemente, en ese momento todos sus sentidos estaban en las bebés.
Brenda lo observó en silencio, sonriendo suavemente al ver cómo les hablaba. E increíblemente, las niñas estaban tranquilas escuchándolo.
—Eso es, niñas buenitas, tranquilas —sonrió, acariciándoles suavemente el pecho a ambas—. Mamá ahora está ocupada y no puede cargarlas, así que ustedes deberán esperar un poquito.
Dana dió un pequeño gritito, fastidiosa, y Blake con cuidado le colocó el chupón.
—Calma, Danita, no hay motivos para llorar, hija.
La niña se quedó tranquila y Blake se apoyó sobre la baranda de la cuna, sonriendo con ternura al verlas.
—Son tan bonitas ambas, y las amo tanto, que no entiendo cómo tanto amor me puede entrar en el pecho.
Brenda se mordió el labio, sintiendo que sus ojos se cristalizaban. Blake se giró en ese momento y al verla de ese modo, se acercó a ella, preocupado.
—¿Qué pasa? —le preguntó apoyando una de sus manos en su mejilla.
—N-Nada, sólo... Jamás creí que encontraría a alguien como tú, o que siquiera existiera alguien como tú, Blake. Y la verdad no entiendo que fue lo que hice para merecer a un hombre tan bueno como tú, después de todas las cosas que hice.
—No digas tonterías, mi amor —sonrió abrazándola—. Tú eres una mujer increíble, una excelente mamá, compañera y esposa. Yo soy el afortunado de detenerte y poder formar una familia contigo.
—N-No, sabes que no es verdad nada de todo eso —sollozó contra su pecho, aferrándose a él—. Con lo basura que fuí, yo sí merecía a alguien como a Kaelan, no a ti.
—No digas eso —le pidió tomándola del rostro, para que lo mirara—. Y de algún modo, sigues justificando lo que él hizo, y no tiene justificación sus acciones. No sólo te dañó y abandonó a ti, sino también a las niñas. Y ni ellas o tú, merecían eso, no cuando tú fuiste tan buena compañera con él, y lo amaste.
—No quiero que pienses q-que lo sigo amando, y sólo estoy despechada, buscando consuelo en ti, porque yo realmente te amo, Blake.
—No sé porqué estás tan sensible, mi amor —sonrió dándole un beso corto—. No tengo inseguridades, por algo eres mi mujer, Brenda —le dijo antes de besarla.
🌗🌗🌗
—¿E-Estás segura? —le preguntó en un jadeo, recibiendo un asentimiento de cabeza por parte de ella, que estaba apoyando su mejilla contra el pecho de él.
Blake la tomó del rostro con una de sus manos, y la besó, tomándola de las caderas con su brazo libre, abrazándola antes de comenzar a penetrarla más lento y profundo.
Brenda apretó sus uñas en la espalda de él y dejó de besarlo, apoyando su frente en el hombro de él, gimiendo.
Blake le corrió el cabello de su hombro izquierdo, y lo besó suavemente, subiendo hasta su oído.
—Perdón, amor —pronunció ronco, antes de volver a bajar a su hombro, y morderlo.
La rubia gruñó al sentir los dientes de él en su carne, apretando los ojos, antes de enterrar sus uñas en la espalda de Blake, cuando lo sintió correrse en ella, uniéndolos a ambos.
Blake gruñó más fuerte, clavándole más los dientes, cuando ella clavó más sus uñas. Hasta podía sentir el aroma de su sangre escurriéndose por su piel.
—B-Blake —gimió con lágrimas en los ojos.
¿Cuánto más pensaba seguir mordiéndola? El dolor parecía que le llegaba hasta los huesos.
—Blake ya, p-para —sollozó, sintiendo que su corazón empezaba a latir errático.
El muchacho suavemente comenzó a abrir la boca, antes de pasar su lengua con cuidado sobre la herida, acariciándole el cabello.
—Lo siento, amor —le dijo besándole suavemente el hombro, subiendo por su cuello.
—No me siento bien —pronunció agitada—. No puedo... Respirar.
—Es la marca, tranquila —murmuró abrazándola a él.
—B-Blake.
—Estoy aquí contigo, tranquila —pronunció en un tono suave, acariciando su cabello y espalda—. Intenta calmarte y dormir.
Apoyó su rostro en el hombro de él, intentando respirar, y cerró los ojos, sintiendo su cuerpo arder, su corazón latir desenfrenado. ¿Seguro era la marca y no un paro cardíaco?
Comenzó a sentirse muy débil, y no supo en qué momento se quedó dormida sobre el cuerpo de Blake.
Él se movió con cuidado sobre la cama, para poder tener una posición más cómoda hasta que pudiera salir de ella, cuando la unión terminara.
Sólo esperaba que las bebés no se despertaran en ese momento.
La observó dormir y sonrió suavemente, dándole varios besos cortos por el rostro, abrazándola a él. La amaba tanto, y ahora un poco más.
Quizás con su unión, y al tener sus corazones en sincronía, ella mejoraba un poco su salud cardíaca.
🌗🌗🌗
—¿Qué demonios le pasó?
—Un paro cardíaco —pronunció el guardia de seguridad, mientras un paramédico le realizaba rcp.
—¿Pero de la nada le dio? —preguntó desconcertado el otro policía, mientras lo subían a una camilla para llevarlo al ala médica.
—Ajá, empezó con problemas de respiración, y me acerqué al ver que se tomaba del pecho. Y no llegué a avisar a los paramédicos de sus síntomas, que cayó al suelo.
—Bueno, si se muere no sería malo tampoco. Después de todo, por algo está aquí.
—Después de todos a los que asesinó, más de uno estará feliz con su muerte. Especialmente la familia de la omega.
...
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Brenda
Short StoryLibro #4 de Los hijos de la Luna Realmente ¿La unión entre dos alfas puede funcionar?